Opinión

Universidad Central, tiempos de cambio

En esta significativa fecha, al cumplir 303 años la Universidad Central de Venezuela, mi corazón y espíritu, se llenan de orgullo ucevista. La casa que vence las sombras y siempre las vencerá: a tener fe y esperanza. Viva la UCV

Jesús Mazzei:

El próximo 22 de diciembre, la Universidad Central de Venezuela, estará de aniversario en efecto, la creación de la Real y Pontificia Universidad de Caracas, significó un paso de innovación y modernización, importante en la estructuración institucional de la sociedad colonial, que sigue con la creación de la Intendencia de Caracas el 8 de diciembre de 1776, la cual dependía directamente del Rey. Sus atribuciones estaban centradas en la política fiscal, lo cual originó conflictos de competencia con los ayuntamientos locales. El Real Consulado, creado en 1793 con funciones de proteger el tráfico comercial y decidir pleitos mercantiles, así como fomentar las actividades económicas.

La creación del Real Consulado coincide con la incubación de los movimientos revolucionarios de la Independencia. Una parte de las funciones de gobierno tocantes al gobernador, a la Audiencia y al Intendente, pasarán a manos criollas por primera vez. Esta clase social, germen de los primeros escarceos independentistas, los criollos fundamentalmente caraqueños, ejercen autoridad sobre extensos territorios de la futura república. Este proceso culminará con la integración político-militar de la Capitanía General de Venezuela el 8 de septiembre de 1777 y se unificarán las funciones militares, de gobierno y judicial en 1786, alrededor del Capitán General. Con ello concluye la formación institucional-colonial venezolana, la Universidad es parte de ese proceso importante, que no debe dejar de mencionarse y reconocerse, por lo que heredemos de España, quiéranlo o no los anti españolistas, (Idioma, cultura, religión, gastronomía y saber económico, entre otros elementos).

Adicionalmente, la Universidad Colonial se verá influenciada por la ilustración, en dos de sus hijos memorables: Juan Germán Roscio y Miguel José Sanz, y además, del papel de Francisco Ustariz, hacedores de la nueva república, mostrada en su primer texto constitucional, la de 1811 y la impronta de 22 diputados provenientes de la Universidad que marcarán las deliberaciones del congreso constituyente de la naciente República de Venezuela. La primera universidad tiene privilegios, es racista y desigual, esto cambiará con los estatutos republicanos del Libertador Simón Bolívar, al reconvertirla en una universidad laica, liberal, republicana, sin privilegios ni discriminaciones, se empezará a abrir de la sociedad colonial-estamental a una sociedad más plural y mestiza. Escoge como su primer rector al sabio Dr. José María Vargas, eximio médico venezolano de inicios del siglo XIX, quién reorganiza los estudios universitarios y ocupa la Presidencia de la República en 1835. La Universidad Colonial vivirá de 1721 hasta 1827, ya que los estatutos de Felipe V, fueron derogados el 24 de junio de 1827, con las decisiones del Libertador-Presidente Simón Bolívar.

Por otra parte, la Universidad vive tres grandes etapas: La primera, Escolástica, la segunda de la filosofía moderna, con la convivencia y maridaje de escolasticismo y racionalismo, que se rompe con la tercera etapa que comienza en 1815 y termina en1821. La Universidad cae en esos años en manos realistas, bajo el amparo y la dirección del Rey Fernando VII. Es una etapa de reacción absolutista, condena las innovaciones y progresos alcanzados por la Universidad liberal, desde la segunda mitad del siglo XVIII hasta la proclamación de la Independencia en el año de 1811.Los estatutos republicanos contentivos de 289 artículos, en los cuales se consagraba la autonomía, el rol del claustro, se dota a la Universidad de patrimonio económico propio, del cual fue despojada por los diferentes autócratas del siglo XIX, que gobernaron el país y era prácticamente una dependencia del Ministerio de Instrucción Pública, con un mezquino presupuesto.

A continuación, el siglo XX, tiene varios periodos; la autocracia gomecista donde vivirá los años más oscuros, ocasionados por el largo cierre, pero la emergencia de tres generaciones importantes: la inigualable generación del 28, la del 36 y la de 1945, constructoras del período más brillante en la historia reciente, las recientes generaciones no estuvieron a la talla, muchos de ellos, provenientes del más rancio marxismo-leninista excluyente y dogmático, que germino en los 60 y tuvo su auge en los años 80,( período que me toco vivir) hoy acosan, a su universidad, a su alma mater, en diferentes frentes y flancos, en diferentes formas, medidas y maneras.

Por otra parte, a república civil de 1958 a 1999, la apertura con López y Medina (el inicio de la construcción del complejo de la ciudad universitaria desde 1941 hasta el año 1952 y la mudanza de la segunda sede, hoy Palacio de las Academias, a lado de la Iglesia de San Francisco), la democratización en el Trienio 1945-48, el cierre con la era pérezjimenista.

Desde 1958 hasta 1999, habrá diversas subfases, en las cuales tendrá mucha influencia en los años 60 el movimiento de la renovación y la insurrección armada marxista-leninista en los años 60, que culminará con la intervención de 1970, realizada para poner orden y restablecer el gobierno universitario. El Dr. Caldera tomó esta difícil decisión política, debido a una situación insostenible de ingobernabilidad en la universidad, en este sentido, para conocer más de la situación planteada, recomiendo el Libro de la Dra. Graciela Soriano de García-Pelayo Sobre la Autonomía Universitaria.

 

A partir de los gobiernos chavo-maduristas, de carácter marxista, no ha habido intervención física directa, pero si indirecta, sí la conculcación de su autonomía presupuestaria y financiera, lo que ha limitado el campo de acción de la Universidad en la investigación y extensión, dos de sus principales funciones y áreas de trabajo de vinculación con la sociedad civil. Además, de lo anterior, hay serias limitaciones en la dotación de sus diferentes bibliotecas, renovación de cuadros profesorales por escalafón, e igualmente se le ha limitado la posibilidad de renovar sus autoridades universitarias en los últimos periodos, en los cuales se debieron realizar elecciones y hace sólo hace un año estas se realizaron, enmarcado dentro de un contexto de constante amenaza. Bajo estas circunstancias, estos últimos 25 años, mediante artilugios jurídicos, sin base en la actual Ley de Universidades, se le puso un freno a la renovación de autoridades.

Actualmente, sobre las Universidades autónomas pende sobre su institucionalización, la elaboración de una nueva ley de universidades, realizada hasta los momentos, sin la consulta debida a las mentes más esclarecidas en materia pedagógica y en los nuevos conceptos de los procesos de enseñanza-aprendizaje, hoy la UCV, reconociendo nuevos y novedosos tiempos, vive un proceso de cambio curricular profundo, en sus diferentes carreras.

Confío en el espíritu ucevista labrado a lo largo del tiempo, lleno de renovación y lucha, que le ha dado al país aproximadamente más de 350.000 hijos graduados en diferentes campos del saber, humanistas y de las ciencias duras que dicen mucho de lo que la Universidad le ha dado a la nación para su modernización, en una época de cambios vertiginosos y convulsos ocasionados por la evolución de la globalización y el intervalo de desarrollo del modelo económico dominante. Hoy, con el paso de la pandemia, y nuevos retos internacionales, académicos y estratégicos, se renuevan los retos en la docencia a través de las clases hibridas a distancia y virtuales, implementadas en nuestra casa de estudios para llevar a cabo el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Finalmente, recomiendo la lectura de dos estupendos textos para adentrarnos en la historia de la UCV, el libro del Dr. Idelfonso Leal Historia de la UCV y el del Dr. Alberto J. Navas Blanco El Rey Felipe V de España y la fundación de la Universidad de Caracas en 1721, hoy Universidad Central de Venezuela.

En esta significativa fecha, al cumplir 303 años la Universidad Central de Venezuela, mi corazón y espíritu, se llenan de orgullo ucevista. La casa que vence las sombras y siempre las vencerá: a tener fe y esperanza. Viva la UCV…

jesusmazzei@gmail.com

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba