Un día extraordinario: La visita de la reliquia del Beato José Gregorio Hernández
Marielena Mestas Pérez:
Es noticia conocida que la reliquia del beato José Gregorio Hernández está peregrinando por las distintas zonas pastorales de la arquidiócesis de Caracas hasta el 26 de octubre, día en que se celebra la memoria litúrgica del llamado “médico de los pobres”. Son 120 parroquias, rectorías, vicarías, centros de evangelización, las que con júbilo, fe y esperanza renovada se han venido organizando.
Las Siervas de Jesús, congregación fundada por la Beata Madre Carmen Rendiles, fueron las encargadas de confeccionar los relicarios que contienen pequeños fragmentos de huesos ornamentados con perlas, encajes e hilos dorados. La confección de tan delicado encargo se llevó un mes de duración. Informó la Madre General de la Siervas de Jesús, Rosa María Ríos, que esto significó para ellas un motivo de gran júbilo y entusiasmo pues la Beata Madre Carmen fue gran devota y propagadora de la devoción al dr. Hernández.
En el caso específico de la parroquia Nuestra Señora del Valle, urbanización Vista Alegre, el párroco, pbro. Eduardo Antonio Campanuolo convocó con un mes de antelación a la feligresía para preparar todo lo concerniente a la visita y organizar el recorrido. Se organizaron diversas comisiones a las que, como explicó el padre Eduardo, se fueron involucrando más y más fieles.
Un aspecto particular fue toda la motivación y preparación previa de todos los residentes: grupos de las distintas instancias eclesiales de la parroquia y vecinos en general. Todos fueron convocados. Siguiendo el programa Jornada Nacional de Encuentros: “Camina con José Gregorio Hernández”, didáctico material que contiene 12 lecciones o encuentros de acuerdo a un tema vinculado con la vida del nuevo beato. Cada tema fue previamente grabado en el templo parroquial, en el hogar de algún vecino de cada sector de la parroquia u otro sitio.
Así, el día 1 de agosto se inició a esta etapa de formación y motivación. Cada programa fue transmitido por medio del canal Padre Eduardo Antonio Campagnuolo, Youtube.
De tal manera llegamos al pasado viernes 13 de agosto. La cita era en la calle 2 de Vista Alegre donde, a las 7:30 a.m. fue recibida con aplausos la esperada reliquia que llegó con un grupo de fieles de La Vega.
El padre Eduardo dio la bienvenida y bendijo a la concurrencia elevando, emotivamente, la reliquia. El sentimiento de alegría era común, pues sentíamos que teníamos al doctor José Gregorio entre nosotros. Con pancartas, globos y música salió la concurrencia en procesión hacia Bella Vista. Luego, de acuerdo al recorrido previamente planificado, la reliquia fue recibida, venerada y despedida en la rectoría Nuestra señora de Coromoto, donde también fue celebrada la Eucaristía. De allí partió al colegio parroquial Nuestra señora del Valle, continuó a Terrazas de Bella Vista, la capilla de las hermanas Adoratrices, las hermanas Siervas del Santísimo y la Misericordia, diversas calles de las Colinas de Vista Alegre, el sector “Los Caciques” de la Misión Vivienda, el parque “Mis Nietos y el parque “Los Monagas”. Ya en Vista Alegre de nuevo, la reliquia fue recibida por numerosa feligresía presente en la clínica “Vista Alegre”. Allí permaneció un buen tiempo y el padre Campagnuolo aprovechó para llevar consuelo a los enfermos y animar a los familiares.
Fue emotivo apreciar cómo las casas estaban ornamentadas con flores, globos, banderas de Venezuela y otros países, afiches y sencillos altares domésticos. Era la forma de demostrar gozo por tan extraordinaria visita. Grupos de vecinos se reunieron espontáneamente a lo largo de los distintos trayectos.
Pese a la copiosa lluvia, al llegar a la casa de las Hijas de la Natividad de María hubo oraciones, cantos, aplausos y de nuevo la palabra cercana del párroco dirigida, particularmente, a las religiosas. Expuso también que se abrió un libro de visitas en homenaje a quienes trabajaron por la causa de beatificación, eran sus devotos y fallecieron sin alcanzar a verlo beatificado. Este libro estará a disposición de quienes lo deseen en la parroquia, hasta el mes de diciembre.
Pese a que ya había anochecido, todo continuaba con una contagiosa alegría y nadie demostraba apuro alguno.
Preciso es destacar que, más allá de la ruta establecida, la caravana se detuvo en distintas oportunidades si a las puertas de alguna vivienda se hallaba algún minusválido, como ocurrió en el caso de nuestra calle: reunidos vecinos de tres hogares distintos, al ver en silla de ruedas a nuestra anciana vecina (de 92 años y quien por más de dos horas esperó gustosa el paso de la reliquia), la comitiva se detuvo y el padre Campagnuolo no dudó en bajarse para saludar y organizar la logística pertinente para que la señora Margot Yépez de Blanco pudiera ver y orar ante la reliquia.
De allí continuaron el recorrido previsto hasta llegar para una breve parada en las calles 7 y 8 y prosiguieron a la calle 12 donde el padre fue advertido de la presencia de un enfermo en un hogar vecino; pues hasta allá fue a llevar consuelo y esperanza.
Finalmente, llegó a la casa de la Congregación Concepcionistas Misioneras de la Enseñanza, (hogar de ancianas). Vecinos y consagradas recibieron animadamente la extraordinaria visita y la Madre Mariana Guinand invitó a la concurrencia a cantar ”Venezuela” y el himno a la Virgen de Coromoto “Salve Aurora Jubilosa”.
La reliquia del beato llegó al templo parroquial cerca de las diez de la noche. Allí lo esperaba la titular del templo: la centenaria imagen de Nuestra Señora del Valle y la reliquia de la beata Madre Carmen Rendiles.
Una emotiva misa terminó pasadas las 11:00 p.m. y un reducido grupo de fieles quedó en el templo hasta las 2:00 a.m. preparando las flores para la entrega, prevista para el día siguiente a las 6:00 de la mañana.
Pues a esa hora partieron, con cierta nostalgia, rumbo a la avenida Morán, donde los bomberos la recibieron y condujeron en una magnífica caravana, hasta el hospital “dr José Ignacio Baldó”, El Algodonal.
Estuvieron presentes además del padre Eduardo Campagnuolo, párroco de N.S. del Valle, Vista Alegre, los presbíteros Rodrick Ninja, párroco de San Joaquín y Santa Ana, Carapita y Roberto Acevedo, Rector de N.S. de Coromoto, Bella Vista.
No puedo concluir sin expresar cómo esta visita renovó muchos corazones, trajo fe y esperanza, todo esto es indiscutible. Pero también quiero destacar la forma paciente, amable y efectiva en la que el párroco aproximó a la feligresía a tan significativo como extraordinario evento que había comenzado mucho antes del día 13.
Que esta visita y la beatificación del doctor José Gregorio Hernández contribuyan a que seamos mejores y más comprometidos cristianos.