Fervor zuliano desafía a la Covid-19 durante La Bajada

En horas de la tarde de este sábado 30 de octubre, los zulianos y visitantes se aglomeraron en la plazoleta de San Juan de Dios para ver de cerca a la Virgen Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, a quien no veían desde el año 2019 que fue su última bajada a puertas abiertas.

Desde hace más de un mes, la organización de la Basílica explicó la manera en la cual podría ir a ver la tradicional bajada de sagrado retablo. Solo se permitiría un aforo de 230 personas en la Plazoleta, no debían llevar niños, llevar su carnet de vacunación con las dos dosis administradas, uso de tapabocas, antibacterial y distanciamiento social.

Sin embargo, mientras caía la noche y se acercaba el momento que la «Campeona de la Salud» descendiera desde su nicho hasta las afueras de la Basílica, la feligresía llenaba los espacios en los alrededores del sagrado punto del casco central de la ciudad de Maracaibo. Muchos sin tapabocas.

Dentro de las inmediaciones de la plazoleta, el equipo de bioseguridad de la Basílica mantenía un control de las personas y su cuidado. Aunque las feligresía con fervor por la Virgen Morena se acercó en cantidad para ver a su amada «Reina».

Un mar de gente llenó todos los alrededores de la iglesia. La cantidad de personas llegó hasta el inicio de la plaza de El Monumento a la Virgen.

La Verdad, Zulia/01 de Noviembre de 2021