“Hay que reaccionar”: Rodríguez Carballo anima a los religiosos a “vencer la tentación de victimismo y frustración”
«Si queréis que la vida religiosa muera, haced política. Ese es el cáncer de la vida consagrada».
“Si estamos convencidos de que la barca se hunde, ¿qué hacemos en ella? Hay que reaccionar”
“Estamos tan acostumbrados a las vacas gordas, y esas vacas han pasado, y no por infidelidad. Hay que vencer la tentación del victimismo y la frustración, que de eso hay mucho en la vida consagrada hoy»
“Estoy muy preocupado porque la política está entrando muy dentro de la vida consagrada, y a mí esto me da miedo. Si queréis que la vida religiosa muera, haced política. Ese es el cáncer de la vida consagrada, y por desgracia se hace mucho”
“Estoy observando un aumento del autoritarismo en algunos grupos, sobre todo en los más nuevos, donde parece que el fundador o fundadora tiene palabras de vida eterna. Y no: esas solo las tuvo uno, y murió en la cruz”
«No hay sinodalidad si no es caminando. La vida consagrada tiene vocación de sinodalidad”
Abusos sexuales: «Se trata de un crimen. Punto. Pero me preocupa qué hacer con los abusadores, porque son personas, pecadores, corruptos, criminales… pero son personas. Para mí es una cuestión pastoral importante. Hay que hacer justicia con las víctimas, pero me preocupa qué hacer con los abusadores»
“Si estamos convencidos de que la barca se hunde, ¿qué hacemos en ella? Hay que reaccionar”. El franciscano José Rodríguez Carballo, secretario de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada, cerró la Asamblea General de Confer con un llamamiento a la esperanza de los religiosos y religiosas españoles porque, pese a lo que muchos piensan, “la vida consagrada sigue contando en España”.
“Menos lágrimas”, reclamó. “Ay… otros tiempos, que no van a volver, o al menos nosotros no lo vamos a ver”, subrayó el religioso, quien insistió en que, pese a los datos, “la vida consagrada sigue contando, no está muerta”.
“Estamos tan acostumbrados a las vacas gordas, y esas vacas han pasado, y no por infidelidad. Hay que vencer la tentación del victimismo y la frustración, que de eso hay mucho en la vida consagrada hoy. Hay que reaccionar”, clamó.
Mesa conclusiva de la Asamblea de Confer Irene Yustres
Consensos, no dictadores
“Hay que lograr consensos, y esto es difícil pero necesario si queremos crecer juntos”, clamó el religioso, quien resaltó que “el Papa ha convertido el camino sinodal en el eje actual de la Iglesia”, frente a “la lucha por el poder o intereses partidistas”, ante lo que, reconoció, “tengo mucho miedo”.
“Estoy muy preocupado porque la política está entrando muy dentro de la vida consagrada, y a mí esto me da miedo.. Si queréis que la vida religiosa muera, haced política. Ese es el cáncer de la vida consagrada, y por desgracia se hace mucho”, advirtió.
“Atención a las palabras, los grandes dictadores fueron grandes líderes”
“Atención a las palabras, los grandes dictadores fueron grandes líderes”, apuntó, contraponiendo el “servicio de la autoridad”. “Estoy observando un aumento del autoritarismo en algunos grupos, sobre todo en los más nuevos, donde parece que el fundador o fundadora tiene palabras de vida eterna. Y no: esas solo las tuvo una, y murió en la cruz”.
La sinodalidad no es una moda
Frente a ello, la sinodalidad, que “no se trata de una moda, o de una excusa. Caminar todos juntos es una exigencia para la Iglesia, de ella depende, en buena medida, su futuro”.
Concluye la Asamblea de Confer Irene Yustres
Con palabras claves, como corresponsabilidad y servicio, carisma y ministerio, unidad, acompañamiento y proximidad. Y también “integración, que nadie se sienta excluido en la Iglesia”. “Es una experiencia de éxodo y liberación, es pasar del ‘Yo’ al ‘Nosotros’, una llamada a cambiar de estilo”.
“El Sínodo resultará vacío de contenido si no nos lleva a una conversión pastoral, que empieza por una conversión personal”, dejando el protagonismo “no a nosotros, sino al Espíritu Santo”. “Por una Iglesia adulta”, apuntó, resaltando que “no hay sinodalidad si no es caminando. La vida consagrada tiene vocación de sinodalidad”.
Mesa conclusiva de la Asamblea de Confer Irene Yustres
Los abusos son un crimen. Pero ¿qué hacer con los abusadores?
En el turno de preguntas, y cuestionado sobre los abusos de poder y sexuales, Carballo admitió que «las denuncias por abuso de poder son constantes, todos los días. Muchas de ellas son falsas, especialmente en la vida femenina». Sobre los abusos sexuales, los definió como «una desgraciada realidad, incluso en la vida femenina o claustral», y recordó que «cuando uno no es clérigo, las denuncias vienen a nuestra congregación, no a Doctrina de la Fe. Todo lo que no sea abuso de menor, viene a nuestra congregación».
«Hay muchas denuncias, nosotros también tenemos comisión. Va muy lento pero me alegro mucho que el Código de Derecho Canónico dé voz a estos delitos que son muy graves», subrayó el secretario del dicasterio vaticano, quien quiso aclarar que «se trata de un crimen. Punto. Pero me preocupa qué hacer con los abusadores, porque son personas, pecadores, corruptos, criminales… pero son personas. Para mí es una cuestión pastoral importante. Hay que hacer justicia con las víctimas, pero me preocupa qué hacer con los abusadores», reflexionó.-