Papa a juristas católicos: «Protejan la dignidad de los débiles afirmando sus derechos»
La mañana del viernes 10 de diciembre, el Papa Francisco recibió en audiencia en el Aula de las Bendiciones del Vaticano, a los miembros de la Unión de Juristas Católicos Italianos con motivo de su 70º Congreso Nacional de Estudios, que se centra en un tema muy cercano al corazón del Pontífice: «Los últimos. La protección jurídica de los débiles».
En su discurso, el Santo Padre agradeció al Presidente de la Unión por sus palabras de saludo y recordó algunas de las experiencias vividas en su reciente Viaje Apostólico a Chipre y Grecia junto a los migrantes y refugiados cuya protección y derechos, son frecuentemente vulnerados.
«Los abusos, la violencia, la negligencia y las omisiones no hacen sino aumentar la cultura del descarte. Y los que no tienen protección siempre serán marginados», dijo Francisco subrayando que a los juristas católicos, se les pide que contribuyan a «invertir el rumbo», promoviendo, según vuestras competencias, la conciencia y el sentido de la responsabilidad.
«Porque incluso los últimos, los indefensos y los débiles tienen derechos que deben ser respetados y no pisoteados. Y esto es una llamada intrínseca a nuestra fe».
Por otro lado, el Papa hizo hincapié en que hoy más que nunca, los abogados católicos están llamados «a afirmar y proteger los derechos de los más débiles en un sistema económico y social que pretende incluir la diversidad pero que, de hecho, excluye sistemáticamente a los que no tienen voz» y añadió:
Al respecto, Francisco puntualizó que esta realidad es un hecho que estamos viendo diariamente:
«Cuántos jornaleros son -perdón por la palabra- «usados» para recoger fruta o verdura… Y luego, pagados miserablemente y echados, sin ninguna protección social», argumentó el Pontífice.
Asimismo, el Santo Padre indicó que el papel del jurista católico, cualquiera que sea su función, como consultor, abogado o juez, es, por tanto, «contribuir a la protección de la dignidad humana de los débiles afirmando sus derechos. De este modo, contribuye a la afirmación de la fraternidad humana y a no desfigurar la imagen de Dios impresa en cada persona».
Igualmente, citando las palabras del cardenal Dionigi Tettamanzi «los derechos de los débiles no son derechos débiles», el Papa insistió a los juristas en cumplir con su deber de «afirmarlos con firmeza y protegerlos con sabiduría, cooperando en la construcción de una sociedad más humana y justa».
«Que la Virgen, a la que hoy veneramos como Virgen del silencio y de la escucha en la Santa Casa de Loreto, y San José, hombre justo, los apoyen en este compromiso y que el testimonio de la beata Rosario Livatino también los inspire», concluyó Francisco.-
Ciudad del Vaticano/Vatican News