El Mundo

La desnutrición crónica golpea a muchos niños en América Latina

La pandemia ha hecho difícil para muchas familias el acceso a alimentos saludables, dejando hambre por un lado y sobrepeso por otro

 

La malnutrición es un problema preexistente en la población latinoamericana, y el Covid 19 ha agravado esta situación.

Porque a muchas familias durante esta pandemia se le ha hecho muy difícil poner en su mesa alimentos saludables, dejando a muchos niños con hambre y otros con sobrepeso.

En el 2021, alrededor de 98 millones de personas se han quedado un día o más sin comer.

Estos datos que hablan de desnutrición crónica de muchos niños en América Latina son desgarradores en el mundo actual, donde por otro lado se desperdician toneladas de alimentos por día.

El papa Francisco expresaba que el hambre en el mundo es un reto, un escándalo, un crimen y una injusticia.

Y hace un llamamiento a hacer “un cambio radical”. No basta con producir “alimentos suficientes” si luego muchos “se quedan sin su pan de cada día».

Todos tienen el deber de extirpar el hambre “mediante acciones concretas y buenas prácticas, y a través de políticas locales e internacionales audaces”.

3 de cada 10 niños menores de 2 años en Ecuador presentan desnutrición infantil

HEALTH

En el mundo se producen suficientes alimentos para satisfacer las necesidades de todos niños y adultos que lo habitan. Sin embargo nos encontramos que más de ⅓  de la población mundial pasa hambre.

Y una de las consecuencias de esto es que actualmente hay muchos niños que están sufriendo desnutrición aguda y crónica.

En Ecuador por ejemplo la desnutrición infantil es el segundo problema de Salud Pública. Ocupa el segundo lugar en América Latina después de Guatemala.

La desnutrición es una de las principales amenazas para la supervivencia, la salud, el crecimiento y el desarrollo de las capacidades de muchos niños. Y también para el progreso de sus países.

El hambre y desnutrición son consecuencia principalmente de falta de alimentos. Pero también hay otros factores que influyen.

Factores como la pobreza, desigualdad, falta de atención, conflictos, catástrofes naturales, el agua, el saneamiento, controles de salud de los 1000 días, entre otros.

La desnutrición crónica perjudica la salud a corto y largo plazo

VENEZUELA
En Venezuela, 16 de cada 100 niños sufre desnutrición aguda

La desnutrición crónica es una deficiencia nutricional. Resulta de una ingesta insuficiente de alimentos (en cantidad y calidad), de la falta de atención adecuada y oportuna y de la aparición de enfermedades infecciosas.

Y sus efectos se harán sentir en el resto de sus vidas.

Pero estas no son las únicas causas de desnutrición. Solo son las inmediatas.

Hay causas subyacentes que son igual de importantes. La falta de acceso a los alimentos, falta de atención sanitaria, agua y saneamiento no aptos para el consumo, las condiciones de la vivienda y, sobre todo, los controles de salud durante los primeros 1.000 días de vida.

Hoy en día se identifica que el embarazo y los 2 primeros años de vida (o más conocidos como los 1000 días de vida) son el periodo crítico para prevenir la desnutrición crónica infantil.

Por eso es fundamental que en esta etapa madres y niños reciban la atención sanitaria necesaria.

Por ejemplo la mujer debe realizarse e los controles del embarazo en el primer trimestre y al menos 5 controles más durante el embarazo. Es la mejor forma de detectar posibles problemas en la salud del bebé o la madre.

Por otro lado, cuando los niños consumen agua contaminada esto puede provocarles diarrea o parasitosis, lo que les impide absorber los nutrientes correctamente.

Además si estas diarreas se repiten en los 2 primeros años de vida, el niño puede desarrollar desnutrición crónica o un retraso en la talla.

La desnutrición en los niños tiene varias consecuencias, como problemas de aprendizaje, sobrepeso, obesidad, enfermedades no transmisibles como diabetes e hipertensión en la vida adulta.

Sugerencias  del papa Francisco contra el hambre y la desnutrición

  • Transformar de forma cuidadosa y correcta los sistemas alimentarios, es decir de manera que sean ambientalmente sostenibles y respeten las culturas locales.
  • Aumentar la resiliencia y fortalecer las economías locales, es decir podemos comprar los productos locales, de cercanía, evitando comprar los productos naturales en los grandes supermercados.
  • Reducir el desperdicio de alimentos. Aquí cada familia juego un rol fundamental, ya que para hacerlo es necesario que todos los miembros de la familia participen activamente. Un ejemplo puede ser organizándose con un plan semanal de comidas, haciendo una lista de compras, y cocinando más en casa. De esta forma se gasta menos, y se desperdicia menos ya que se compra solo lo necesario, y se cocina únicamente lo que se va a comer, y el resto se puede congelar.
  • Mejorar la nutrición, brindando dietas saludables accesibles para todos. Poder acceder a alimentos básicos para asegurar una adecuada nutrición en los niños y así tener un buen crecimiento y desarrollo.
  • Elegir opciones más sanas y nutritivas, frutasvegetales, legumbres, cereales integrales, agua potable.
  • La familia es un componente esencial de los sistemas alimentarios. El Papa dice que es allí donde se aprende a disfrutar del fruto de la tierra sin abusar de él. Y también es donde podemos encontrar las mejores herramientas para promover estilos de vida saludables y respetuosos del bien personal y colectivo.
CHILD

Por lo que como padres tenemos la responsabilidad de enseñar a nuestros hijos el valor de alimentarse saludablemente y de tener conciencia alimentaria y ecológica.

Los controles durante el embarazo, así como los del bebé recién nacido y durante los dos primeros años de vida, son esenciales para detectar y prevenir la desnutrición crónica infantil.

Del mismo modo se recomienda darles todas las vacunas necesarias incluyendo la del neumococo y rotavirus para protegerlo de enfermedades respiratorias y diarreas. Si los niños no reciben la atención adecuada estas enfermedades pueden ser graves o letales.

Es fundamental para que los niños tengan un adecuado crecimiento y desarrollo que puedan acceder a alimentos  nutritivos, al agua potable y a condiciones dignas de saneamiento y vivienda.

Para ello todos de nuestro modo podemos poner nuestro granito de arena. Con acciones desde nuestro hogar o colaborando con organizaciones que ayudan a los niños, como Caritas y Niños de María.

Bibliografía consultada: https://www.vaticannews.va/es/papa/news/2021-07/mensaje-papa-francisco-pre-cumbre-sistemas-alimentarios.html

https://www.unicef.org/lac/comunicados-prensa/nuevo-informe-de-la-onu-el-hambre-en-america-latina-y-el-caribe-aumento

María Eugenia Brun – publicado el 30/12/21-Aleteia.org

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