¿Quién ganó la partida? ¿El régimen o Joe Biden?
Egildo Luján Nava:
El mundo entero quedó sorprendido. Especialmente, así lo registraron los pueblos de los Estados Unidos de Norte América. Asimismo, el tan golpeado pueblo venezolano. ¿Motivo?: el canje de prisioneros efectuado recientemente entre ambos países.
Igualmente, llamó la atención la denuncia y la calificación que las partes le dispensaron a sus respectivos reclusos liberados.
Estados Unidos, por ejemplo, calificó a los dos suyos como de ciudadanos norteamericanos. Además de detenidos injusta e ilegalmente, por lo que su condición era y siempre será la de rehenes inocentes.
Venezuela, por su parte, calificó a los dos suyos de ciudadanos americanos detenidos por las autoridades venezolanas. Y atribuyéndoles la calificación de delincuentes sometidos a juicio por los tribunales de justicia. ¿Motivos?: por presuntos vicios y hechos de corrupción cometidos en una empresa del Estado venezolano.
Paralelamente, por su parte, el Gobierno Americano calificó a los dos venezolanos de «familiares de la pareja presidencial en su país de origen, presos en Estados Unidos». ¿Motivos?: delincuentes corruptos y traficantes de drogas, detenidos infraganti, y enjuiciados en USA en tribunales imparciales, donde se les concedió el legítimo derecho a su defensa.
Estos últimos, luego de un prolongado juicio, fueron declarados culpables y sentenciados a cumplir 18 años de prisión.
Como se puede apreciar, según las declaraciones de los voceros de ambos países, los respectivos connacionales, según ellos, son Ángeles impolutos, injustificadamente detenidos. Pero, contradictoriamente, según las declaraciones de los países en relación con los presos foráneos, a ellos los identifican como corruptos y narcotraficantes convictos.
Al analizar las razones del canje de los prisioneros, lo primero que salta a la vista es la decisión de los Estados Unidos -vulnerando y quedando en entredicho- de actuar con base en un cuasi código de honor para los Estados Unidos, y con base en el cual se jactaban de actuar sin «negociar bajo ninguna circunstancia con hampones, criminales, o narcotraficantes». Es decir, procedían así con base en la vigencia de una calificación que, según ellos, le habían dado a la pareja Presidencial venezolana, con quienes negociaron el canje.
En el segundo orden de consideraciones y desconcierto, cabe preguntar: ¿ Cómo queda el celoso respeto y la separación e independencia de los poderes públicos en USA, cuando su Presidente indulta, libera y entrega a unos reos enjuiciados y sentenciados por su máximo Tribunal de Justicia?. De igual manera, ¿cómo queda el Poder Judicial Norteamericano, luego de haberlos declarado culpables y sentenciados a 18 años de encierro?.
Es obvio que las respectivas familias de los detenidos canjeados, tienen que aprobar y estar felices por el canje, lo cual nadie puede criticar. Pero ¿ cómo quedan los valores morales, ética y de justicia en el país del Norte?
Como consideración adicional importante, cabría preguntarse: ¿Y con esta acción inesperada, no se está poniendo en riesgo a todos los norteamericano esparcidos por el mundo, al dejarse entrever que esa es la intención de su Gobierno, ante un secuestro de cualquier Norteamericano, por lo que se depende de un precio por sus cabezas, como por un valor de canje para con las mafias o regímenes corruptos?.
Asimismo, es importante analizar y plantearse lo siguiente: ¿Cómo influirá esta decisión públicamente, en relación con la gestión del Presidente Biden?. De igual manera, ¿y cuáles serán las posibles consecuencias de esta acción impopular por el canje de prisioneros con Venezuela.
En relación con las próximas elecciones en noviembre del presente año, y denominadas»Midterm»en USA), y con base en la cual se elegirán 435 escaños de la Cámara de Representantes, 33 ó 34 de los 100 Senadores y, además, se elegirán 34 Gobernadores de un total de 54, la pregunta lógica que ya se plantea es la de:_ ¿Y cómo influirá esta determinación de intercambio de prisioneros en la distribución de poder resultante entre Demócratas y Republicanos?
Ante todas estas interrogantes y observaciones, como en la convicción y creencia de que los Estados Unidos es «El Imperio y Primera Potencia Mundial», por lo que no da puntada sin dedal, sin embargo, se asume que los riesgos aquí planteados no se trata de pasos en falso. Además, estando el mundo ante tan complicadas situaciones políticas y económicas, se hace difícil creer que, detrás de estas inentendibles decisiones para el llamado «público de Galería», no hay un secreto plan futuro de acción desconocida.
Por ejemplo, entre ruidos ocultos y compromisos desconocidos, ¿qué desempeños favorables tendrían adicionalmente Venezuela, Nicaragua y Cuba?. Porque, después de todo, entre acuerdos, entendimientos y hechos sin aparente justificación, hay una verdad que alguien la va a agradecer, sin necesidad de convertirla en espectádulo público. Y tiene que ver con el evidente hecho del pragmatismo de la política con la que se apuestan situaciones que se desconocen.
Lo cierto es que mientras algunos se rompen la cabeza, detrás de interpretaciones que lucen absurdas, otros insisten en encontrarle sentido a lo que no lo tiene, mientras afirman que todo lo que sucede forma parte de un secreto plan para recuperar influencia en el continente Americano, a la vez que se le relaciona con la posibilidad de que lo que está sucediendo, responde a la audacia de liberarlos de sus respectivos regímenes totalitarios, permitiéndoles recuperar la senda de la democracia, justicia, prosperidad y su sagrada libertad. ¿Seguro que es así?.-