Mundial Qatar 2022
En este mundial, 204 naciones recibieran la señal de satélite de Catar y se calcula que más de 3.500 millones de personas verán por televisión los partidos de las 7 principales potencias deportivas en materia futbolística
Jesús Mazzei Alfonzo:
El pasado domingo 20 de noviembre, se inauguró el XXII Campeonato Mundial de Fútbol, Qatar 2022, veré, si Dios quiere, mi mundial número catorce (14). Aquí en este evento deportivo, se observa en toda su magnitud, fuerza y calibre, la globalización deportiva en particular y en general, la globalización como lo he expresado en anteriores oportunidades; un proceso y tendencia de difusión de ideas, valores, formas de producción y de comercio, procesos y productos, diseños organizativos y formas de conducta, a través de las fronteras nacionales en una situación de mayor porosidad interméstica. Es decir, flujos transfronterizos de bienes, servicios, capitales, personas, interacción de culturas, razas. Un proceso y tendencia dinámica, por lo tanto, que conduce a una mayor y creciente articulación e interdependencia de todas las sociedades. Los servicios y los eventos deportivos son una manifestación de ella y la globalización, se expresa en una forma interesante, cuando se realizan eventos de alto nivel competitivo en forma cuatrienal como quedará de manifiesto con este nuevo mundial de fútbol. El mundo tendrá una tregua necesaria, agradable, una energía positiva, dentro de lo que han sido estos convulsos años (COVID-19 y la guerra de Rusia contra Ucrania). El fútbol, es uno de los factores más eficaces para condensar identidades colectivas, de acuerdo a Carlos Pagni.
En tal sentido, la dimensión deportiva de la globalización se ve en toda su extensión en este evento, con todo el éxito para el país anfitrión, en donde reside el desarrollo acelerado de un complejo deportivo, comunicacional de dimensión transnacional que tiene alguna de estas características: establece parámetros globales de competición y excelencia entre individuos, crea modelos de roles (héroes deportivos), son parte de una élite deportiva, crea eventos que son sintonizados simultáneamente por proporciones altas de la población mundial, entre un 10% y 30% de la población mundial, los cuales movilizan amplios recursos financieros y, en términos de la producción de equipamiento deportivo y marketing de productos mundializados, produce una crema de ciudadanos deportivos con gran movilidad de nacionalidades que se encuentran en estos eventos mundiales del deporte.
Qatar, aspira a tener una inversión redituable en ganancias de más de 20.000 millones de dólares, luego de un gasto en construcción de infraestructura 17 veces más que el costo de Rusia y Brasil, que ya fueron unos mundiales que costaron 15.000 de dólares en gastos de construcción de infraestructura y servicios asociados al evento, se calcula que más o menos el gasto llega a 200.000 mil millones de dólares del actual Copa de del Mundo. Además, de las críticas por la falta de derechos laborales y estándares discutibles en materia de derechos humanos en la sociedad catarí.
Por otra parte, estarán trasnacionales de la comunicación como ESPN, FOX, de confección de ropa deportiva como Umbro, Adidas, Puma, Nike, esta última que tiene un contrato con la Confederación Brasileña de Futbol que data del año 1998, con la selección brasileña, además, de otros patrocinantes o sponsors que patrocinan el mundial como la Cannon entre otras empresas de las telecomunicaciones de informática, empresas de tarjetas de crédito como Master Card, que es uno de los patrocinadores oficiales desde hace muchos años, bebidas gaseosa como la Coca Cola o de comida rápida como Mc Donald’s. Hoy el Fútbol mueve aproximadamente más de 500 mil millones de dólares es la industria de esparcimiento y entretenimiento deportiva, más poderosa del planeta la FIFA agrupa a más de 198 países. Se calcula que más de 2 millones de personas visiten Qatar. Hay, más de 12.300 periodistas acreditados.
Se habla con mucha propiedad de un hecho donde la globalización en sus diferentes dimensiones económicas, financiera, cultural y deportiva, se manifiesta de una manera concreta por las redes que establece y las conexiones con las diferentes empresas multinacionales que tienen importantísimo para el éxito económico de este evento deportivo que se celebra cada cuatro (4) años.
Así las cosas, observamos que el fútbol, ha evolucionado desde la época del mundial de México 70, en su táctica, en la polifuncionalidad de sus jugadores, mejor condición física, cuando este deporte en esa época se completó de globalizar gracias a los medios de comunicación, al inicio del impacto de las telecomunicaciones por satélite y la comercialización más agresiva por parte de importantes marcas, a partir de esa década. También sufrió una evolución táctica que va a estar en su cenit en aquellos años con el fútbol total de la naranja mecánica del mundial de Alemania de 1974, y que el Brasil en 1970, mostró pinceladas de él, con los 5 dieces, de acuerdo a la conceptualización de César Luís Menotti sobre: Pelé, Tostão, Jairzinho, Gerson, Rivelino y Carlos Alberto agregaría yo, equipo jamás igualado en su juego y disposición en el campo. Brasil, volverá hacer mi selección favorita, como lo ha sido desde 1970. Ojalá veamos jogo bonito. Veremos si hay un planteamiento novedoso en este mundial, lo que si estimo será un mundial donde la preparación física y la velocidad, marcarán el ritmo del juego y los esbozos tácticos de los equipos.
En este mundial, 204 naciones recibieran la señal de satélite de Catar y se calcula que más de 3.500 millones de personas verán por televisión los partidos, de entre otros, de las 7 principales potencias deportivas en materia futbolística: Alemania, Inglaterra, España, Francia, Holanda, Brasil, Argentina y Uruguay. Italia será la gran ausente, por segundo mundial consecutivo. Para Brasil, en particular, se presenta como la gran oportunidad para reivindicarse de los desastres deportivos de los mundiales del 2006,10,14 (sobre todo este último que se realizó en territorio brasileño) y 18, que tendrá que bajo el liderazgo de Tite, que le ha dado consistencia y coherencia táctica y estratégica al equipo, con Neymar a la cabeza de la selección brasileña, que tiene además a Vinicius, Rodrygo entre otros, que la hacen una de las favoritas, para llevarse el título.
Así las cosas, la creciente importancia de los servicios, sobre todo los entretenimientos y esparcimiento y sobre todo los deportivos en los últimos años, en los países desarrollados, y en la economía de los países emergentes y en desarrollo, los correspondientes al productor, propiciaron que ese sector se convirtiera en el determinante principal de la productividad y la competitividad deportiva en todas sus facetas. Por ello, el aumento del intercambio mundial en servicios fortaleció los vínculos entre comercio, tecnología, inversión y los mundiales y las olimpiadas son una muestra de ello.
Por otra parte, esto explica por qué los países desarrollados, emergentes y en vías de desarrollo y las empresas transnacionales consideran a los servicios como un sector estratégico en las negociaciones multilaterales en materia comercial. La inversión extranjera directa junto con la universalización de la producción ha tenido efectos considerables en la evolución reciente del comercio internacional de servicios. Un hecho fundamental de los últimos años es la tendencia de las grandes empresas a establecer sistemas integrados y complementarios de producción y comercialización, sobre todo con estrellas del balompié.
Esta es una de las propensiones que se han profundizado hoy más que nunca, en una economía mundial donde los servicios juegan un papel clave y definitorio en lograr altos niveles de estadio de desarrollo deportivo y económico. Actualmente, el fútbol, no solo es una actividad deportiva, sino, además, es un trabajo bien remunerado.
Esta es una de las grandes inclinaciones que se ha profundizado hoy más, una economía mundial donde los servicios juegan un papel clave y definitorio en lograr altos niveles de estadio de desarrollo deportivo y económico, más elevados.
Foto referencial: Diario AS
