Cultura Católica

Explican por qué el Día de los Santos Inocentes no es para bromas

Fray Nelson Medina, conocido sacerdote dominico que realiza un amplio apostolado en redes sociales, explicó por qué el 28 de diciembre, día en que la Iglesia Católica recuerda a los Santos Inocentes, no debe ser ocasión para bromas o chistes.

Los Santos Inocentes son todos los niños mártires, menores de dos años, que fueron asesinados por orden del Rey Herodes, quien de ese modo quería eliminar al Niño Jesús nacido en Belén.

En declaraciones a ACI Prensa, Fray Nelson propuso tres criterios a tener en cuenta para la reflexión.

1. El humor es bueno

“El buen humor es un ingrediente importante de nuestra vida, para nuestra salud mental y nuestra relación con otras personas”, indicó el también Doctor en Teología Fundamental.

2. No todo es objeto de humor o chiste

Sin embargo, “no todo es objeto de humor o de chiste. Efectivamente, allí donde hay injusticia, crueldad no hay espacio para el humor”, precisó.

“Pensemos en tantas tragedias que acontecen en nuestros días y nuestro tiempo, por ejemplo el Holocausto. Creo que todos estaremos de acuerdo en que no es correcto hacer chistes de tanto dolor, tanta crueldad y tanta injusticia que se dio en aquella época”, afirmó el sacerdote.

Fray Nelson indicó a ACI Prensa que “si recordamos en los Evangelios qué fue lo que sucedió cuando murieron aquellos niños inocentes, entendemos que igualmente hubo una espantosa crueldad, que está claramente mostrada en la pena de muerte para estos pequeñitos”.

“Hay una terrible injusticia, porque no se tuvo en cuenta el derecho a la vida de ellos ni tampoco los reclamos ni las lágrimas de sus mamás y papás. Eso ya nos enseña que la matanza de aquellos inocentes no es objeto de chistes o humor”, destacó.

3. La matanza de niños sigue en nuestros días

Fray Nelson lamentó luego que “la matanza de inocentes continúa en nuestro tiempo de muchas maneras, incluso si pensamos en los niños”.

“Hay niños que mueren de hambre, hay niños que mueren de enfermedades que se hubieran podido prevenir perfectamente”, continuó.

“Y sobre todo tenemos el caso de tantos niños y niñas que son asesinados antes de nacer” por medio del aborto, denunció el sacerdote dominico.

Por eso, concluyó, “el 28 de diciembre no debería ser ocasión de superficialidad o de banalidad, sino más bien de agradecer a Dios por el testimonio de estos pequeños mártires; y de reflexionar sobre el inmenso valor de la vida humana”.-

WALTER SÁNCHEZ SILVA | ACI Prensa

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba