La fe católica en Cuba tiene un fuerte arraigo, sobre todo porque es la religión que trajeron los españoles al Nuevo Mundo. En Cuba, como en otros países de América, el catolicismo ha sido asimilado de una forma muy particular por el pueblo. Sin embargo, la tradición de alzar hermosos templos donde adorar a Dios y a los santos católicos ha sido asumida en América al modo que se hiciese en Europa.
Construir la iglesia más bella, la más ornamentada, la más rica, la que posee el más alto campanario o la que alberga las más bellas imágenes, entre otras muchas motivaciones, mueven al fervor popular cuando de construir un edificio religioso se trata. En este afán de «demostrar» es que se construye uno de los templos católicos de mayores dimensiones de Cuba: la iglesia de Cristo Rey, conocida popularmente como Jesús de Miramar.
Una gran iglesia para una gran avenida
El actual municipio Playa alberga algunos de los más lujosos barrios de La Habana, colmado de hoteles como el Comodoro, Meliá Habana, Copacabana, Tritón, Panorama, entre otros. Es también, este municipio, lugar de localización de muchas embajadas, sobre todo en la Quinta Avenida, calle donde antiguamente tenía su residencia una parte importante de la burguesía habanera. Justamente allí se encuentran varias hermosas y modernas iglesias, entre las que destaca por su anchura y belleza Jesús de Miramar.
El templo de Cristo Rey en La Habana
La Iglesia Jesús de Miramar es un templo erigido a Cristo Rey que se encuentra en la Quinta Avenida, esquina a 82, y pertenece a la arquidiócesis de San Cristóbal de La Habana Su construcción se inició en 1948 y se culminó en 1953. El arquitecto encargado de esta monumental obra fue Eugenio Cosculluela y su cimentación fue impulsada por el religioso español Fray Aniceto de la Orden de los Capuchinos.
El templo tiene además una inmensa gruta a su lado derecho donde hay una imagen de Nuestra Señora de Lourdes, muy venerada por los feligreses. En el lado izquierdo la iglesia cuenta con un patio interior y un edificio, de varios pisos para los sacerdotes, en cuyos bajos hay una pequeña salita de teatro, además de salones para catequesis, y otras actividades de la iglesia.
El estilo arquitectónico se debate entre el neo-románico y el romano bizantino, y su decoración tiende más bien a la sobriedad y la elegancia que al lujo u ornamentación excesiva. El templo posee una fachada con tres monumentales puertas, y techo a dos aguas de menor tamaño que el de la nave principal, que también cuenta con una techumbre de iguales características.
La planta del edificio es en forma de cruz latina, por lo que posee naves laterales. A la izquierda se encuentra la virgen de la Caridad del Cobre, patrona de Cuba, y a la derecha Santa Ana, la madre de la virgen María. El interior del templo está decorado con arcos de medio punto, y columnas de mármol de diferentes colores. Otro elemento que la tipifica es el piso hecho de terrazo.
Quizás una de las características más sobresalientes es su vía crucis, constituido por 14 murales de gran escala, pintados sobre las grandes paredes del edificio, obra del pintor español César Hombradós. En estos murales, se dice, el pintor empleó como modelos para los personajes bíblicos a algunos de las personas que donaron dinero para la construcción del recinto.
Superlativos arquitectónicos de Jesús de Miramar
Se dice que esta iglesia es la segunda mayor de la Perla del Caribe debido al área que ocupa, solo superada en proporciones por la Catedral de Santiago de Cuba. El órgano de tubos con que cuenta este templo, actualmente inhabilitado, es el mayor de Cuba y posiblemente uno de los más grandes del mundo. Este fastuoso instrumento tiene tres consolas y podía alcanzar hasta 73 registros reales.
Pero no todo queda aquí, esta iglesia nos sigue sorprendiendo, pues su cúpula es la segunda más grande de Cuba, después de la del Capitolio habanero. Sus amplísimos parqueos a ambos lados permiten observar a transeúntes y fieles las enormes proporciones del templo, ante el cual todos dicen sentirse muy pequeños, pero cuyo interior resulta acogedor como una buena casa de Dios.
Un Cristo de Medinaceli de Madrid en La Habana
La imagen de Cristo Rey, que se encuentra en el altar mayor de esta iglesia habanera, es muy similar a la que se halla en Madrid en la Basílica de Nuestro Padre Jesús de Medinaceli, conocido como el Señor de Madrid. Ambas imágenes, la habanera y la madrileña, evocan el momento de la pasión de Cristo cuando es presentado ante el pueblo por Poncio Pilatos. El rostro del Jesús de Miramar representa el dolor sufrido, lleva corona de espinas, cabello natural y una túnica púrpura muy decorada; sus manos están atadas y mira con dolor desde la altura a los fieles, en un gesto que inspira piedad y misericordia. Es esta sobrecogedora representación de Cristo otro vínculo, otro lazo que une a España y a Cuba, en esta ocasión a través de la religión mediante la adoración del nazareno.
Otros templos católicos cercanos
En el municipio de Playa existen otras muchas iglesias dignas de ser mencionadas. Si después de visitar el monumental templo de Jesús de Miramar quiere conocer otras, estas son las que le sugerimos.
Ubicada en la calle 146, muy cerca de la rotonda de Quinta Avenida, está la Iglesia del Corpus Christi. Se caracteriza en su exterior por una alta torre, y una entrada en cierto sentido modesta. Su interior está marcado por arcos ojivales y un vía crucis pintado en un mural continuo de colores sepias. Es un templo muy luminoso y apacible.
En 60 y Quinta Avenida se encuentra otra monumental iglesia: el Santuario Nacional de San Antonio de Padua. Presenta una arquitectura muy sobria y la entrada principal tiene tres altísimos arcos de medio punto. Se caracteriza por tener una alta torre, y un inmenso vitral que dibuja de manera muy sencilla una cruz porque su exterior es de piedra.
La iglesia de la venerada Santa Rita de Casia, patrona de las causas difíciles y abogada de lo imposible, es otro de los templos cercanos a Jesús de Miramar. Es un edificio moderno de líneas muy sencillas pero que conserva la forma tradicional con planta en cruz latina. Tiene una hermosa imagen de Santa Rita de Casia de líneas curvas, hecha por la célebre escultura Rita Longa, que resulta de una gran belleza en su sobriedad. El interior del recinto se destaca por inmensos arcos de hormigón armado y grandes ventanales. Es una iglesia muy amplia y luminosa, que se encuentra en 5ta esquina 26.
Las iglesias de Miramar
Los nuevos templos católicos ubicados en el municipio Playa son de una arquitectura más bien sobria, con tendencia a la modernidad, se caracterizan por condiciones de comodidad, luz y amplitud. Acercarse a la fe católica cubana a través de estas edificaciones significa comprender un poco más cómo se vive la religiosidad en ese país caribeño, donde inmensas iglesias como Jesús de Miramar sorprenden al transeúnte.-
