Entrevista a Doña Susana Arregui García, directora del Secretariado de Apostolado Seglar de la Archidiócesis de Madrid

Esta Jornada será presidida por el Cardenal Arzobispo D. Carlos Osoro Sierra y tendrá como lema: “Testigosvalientes, anunciadores de Cristo en el mundo” y la ponencia principal estará a cargo del Rvdo. D. José Antonio Cano Cano, consiliario nacional de Acción Católica General.

Entrevistamos a Doña Susana Arregui García, Directora del Secretariado de Apostolado Seglar de Madrid y motor principal de estas Jornadas. Susana Arregui pertenece al Movimiento Apostólico de Schoenstatt, es madre y abuela de dieciséis nietos, ha sido miembro de la Comisión Central del Sínodo de la Archidiócesis de Madrid en 2004, miembro del Consejo Diocesano de Pastoral de la misma Archidiócesis, así como del Consejo de Laicos y de la entonces Delegación de Apostolado Seglar, hoy Delegación de Laicos, Familia y Vida.

1.- Doña Susana el lema de la XXI Jornada es: «Testigos valientes, anunciadores de Cristo en el mundo» ¿qué los ha llevado a Uds. a escoger ese lema? ¿Realmente los laicos del 2023 se sienten comprometidos con la labor misionera de la Iglesia para ser testigos y anunciadores?

Desde el inicio de esta nueva etapa del Secretariado de Apostolado Seglar hemos tenido presente el impulso que el Congreso Nacional de Laicos produjo en nuestros movimientos y asociaciones y nos comprometimos a mantener nuestra implicación y participación en esta corriente de vida. Al mismo tiempo, el proceso sinodal que estamos viviendo ha puesto de manifiesto algo que ya vivimos en nuestras comunidades y que experimentamos con fuerza en ese congreso. Para nosotros esto tiene continuidad y ese es el acento que, especialmente, hemos querido dar en este curso.

Para poder trabajar en profundidad los cuatro ejes que se desarrollaron en el Congreso, desde la comisión de Laicos, Familia y Vida de la Conferencia Episcopal Española, propusieron hacerlo a lo largo de distintos cursos, y sugiriendo empezar con el Primer Anuncio. Por ello, en esta Jornada, en sintonía con toda la Iglesia Española, nos centraremos en el “Primer Anuncio”, pues es el elegido para trabajar a nivel nacional

Por ello el lema de la Jornada es: Testigos valientes, anunciadores de Cristo en el mundo

Este lema no solo recoge un anhelo, sino que manifiesta una realidad que, aunque hay aún mucho camino por recorrer, los laicos cada vez nos sentimos más comprometidos y protagonistas con la labor misionera de la Iglesia. El impulso del Congresos de 2020 y el Camino Sinodal propuesto por el Papa Francisco están fortaleciendo la certeza de nuestra corresponsabilidad en el anuncio del Evangelio ante los desafíos del mundo actual y a ser parte activa del llamado de Cristo a trabajar por el Reino.

2.- ¿A quiénes van dirigida la convocatoria para participar en la XXI Jornada Diocesana de Apostolado Seglar de Madrid?

A esta jornada están convocados todos los seglares de la Archidiócesis de Madrid. Hemos invitado tanto el apostolado seglar asociado de movimientos o asociaciones, como al de las parroquias y vicarías. También hemos enviado una convocatoria a las hermandades y cofradías.

3.- ¿Cuál es su visión a respecto del apostolado seglar en Madrid? ¿Hay un entusiasmo misionero y evangelizador? ¿qué retos ve delante de esa realidad asociativa?

Mi visión siempre es positiva, aunque, es verdad, que nos quedan muchos retos y camino que recorrer. Desde este Secretariado tenemos la suerte de estar en contacto con laicos comprometidos, con un auténtico amor a la Iglesia y que, como miembros activos de ella, son consciente de su corresponsabilidad en su acción evangelizadora.

Pero esto no es la mayoría, aún hay muchos seglares que se sienten receptores y no protagonistas y sienten que la misión de la Iglesia solo les corresponde a los sacerdotes o consagrados.

Esta realidad se ha reflejado con fuerza en las conclusiones para el Sínodo de los Obispos 2021-24 que presentó la comisión diocesana, en ellas se destacaba la importancia de promover la participación de los laicos, ysuperar el clericalismo, compartiendo responsabilidades, y ayudando a vencer la pasividad y la falta de implicación de muchos fieles laicos en la Iglesia.

Este es un de los retos del Secretariado de Apostolado Seglar junto con el de crear más conciencia diocesana y unidad entra los movimientos y asociaciones que forman parte de nuestra Iglesia en Madrid.

La formación también es para nosotros un reto y estamos trabajando en ello para el curso que viene.

4.-  En varias oportunidades el papa Francisco ha dicho que: es necesario prestar atención, a los nuevos lenguajes, a los “escenarios y areópagos que son de lo más variado” y que “si nos mantenemos solamente en los parámetros de «la cultura de siempre»”, el resultado será la anulación de la fuerza del Espíritu Santo. Dios está en todas partes: “hay que saber descubrirlo para poder anunciarlo en el idioma de esa cultura; y cada realidad, cada idioma, tiene un ritmo diverso”.  Frente a ese reto ¿qué recomendaría Ud. a los laicos de Madrid para aplicar en su labor de apostolado lo expresado por el Pontífice?

Les diría, en primer lugar,  que pongan al servicio de la Iglesia y de nuestros hermanos los carismas que han recibido, adaptándolos al tiempo actual.

En Schoenstatt decimos que hay que tener la mando en el pulso del tiempo y el oído en el corazón de Dios.

Como seglares estamos llamados a cumplir nuestra misión en medio del mundo y para esto es imprescindible, a través de la escucha y el discernimiento, descubrir las necesidades del tiempo actual y de la cultura que nos rodea para que, mirando al hermano con la mirada de Dios, seamos capaces de dar la respuesta que necesitan y, con audacia, hacerles llegar la alegría del Evangelio.

5.- Veintiún años de Jornadas Diocesanas de Apostolado Seglar en la Archidiócesis de Madrid, ¿qué balance hace Ud. de estas 21 Jornadas realizadas por Ud. y antes por D. Rafael Serrano y sus respectivos equipos de trabajo?.

La primera Jornada Diocesana de Apostolado Seglar en nuestra Archidiócesis

tuvo lugar el sábado 16 de Junio de 2001, desde entonces hasta la jornada actual, han sido momentos de máxima importancia para el apostolado seglar de Madrid.

Los fines que se marcaron desde esa primera jornada: ser foro de diálogo que ayude a profundizar en los grandes retos que la sociedad plantea a la Iglesia en su misión evangelizadora, crear una mayor conciencia diocesana, avanzar en corresponsabilidad y comunión y fortalecer el apostolado seglar y sus asociaciones, se han mantenido y han dado abundantes frutos que hemos podido comprobara través de los testimonios y acciones de los muchos participantes.

Puedo decir, con seguridad,  que uno de los mayores frutos que han dado las jornadas es la contribución a crecer en conciencia diocesana, a conocernos mejor y a fortalecer los lazos de unión, formando, con la ayuda del Espíritu Santo, un laicado cada vez más maduro y comprometido.-

Cortesía de José Alberto Rugeles Martínez, desde Madrid