¡Qué tarde piaste, pajarito!
Extrañamente, presentó su renuncia a menos de tres meses de cumplirse la meta de la Comisión
Egildo Luján Nava:
La expresión se ha convertido en una constante semanal: los venezolanos han perdido la capacidad de asombro, cuando corresponde reaccionar ante la descarada desfachatez con la que muchos dirigentes opositores o alineados con el régimen, y bien sean del sector político, empresarial, laboral o dirigencial.
En fin, ya no importa el origen o las actividades a las que se dedican individualmente o en cambote.
No es exagerado decirlo. Pero es casi imposible definir moralmente las acciones o reacciones en cuanto a lealtad o compromiso ciudadano que suceden en Venezuela.
Claro, se dan casos que se pueden entender: por acciones o reacciones sujetas a amenazas, por aquello de que el miedo es libre. Pero, lamentablemente, y con mucha frecuencia, el absurdo y hasta desleal comportamiento, en múltiples casos, la motivación se trata únicamente de beneficios personales.
Desde luego, así como se ha perdido la capacidad de asombro, también hay que aprender a potenciar la capacidad de memoria y a no olvidar el sabio hecho colectivo de que, a la par de tales comportamientos, el tiempo da y quita. Es por eso por lo que otro patrimonio colectivo de dura fuerza es aquel que reza y precisa que, a la vez que Venezuela, durante ya casi 24 años, ha tenido que aguantar o sufrir por la destrucción paulatina del país, existe la expectativa de que, invariablemente, esta etapa también llegará al final y será pronto. Y el hecho, desde luego, permitirá que nuestra maltrecha Patria, y gracias a la Divina Providencia que la ha dotado de grandes recursos materiales y humanos, todo lo cual se traducirá en la expresión en forma exponencial de la respuesta para recuperar rápidamente el país como a un todo, a niveles del primer mundo.
Todo ello se traducirá, desde luego, en una verdad de retos que no se debe olvidar y que habrá de convertirse en un tema de permanente insistencia. Y se trata de que, cuando llegue el cambio y el momento de la recuperación se manifieste, los «BICHARACOS» o falsos dirigentes y personajes acomodaticios, no pueden pretender alcanzar posiciones de conducción, afianzando su comportamiento sobre los soportes morales que el país ha podido sostener.
Por el contrario, ese mismo país debe reaccionar con capacidad de limpieza. Y de hacerlo con el coraje imprescindible para evitar el posicionamiento del descaro, para justificar méritos que no son tales, y reconocimientos dirigidos a continuar alimentando la miseria de la burla y del aprovechamiento. Casi 3O años lo han dicho todo, y ese todo no es otra cosa que descaro y, como lo describe la ciudadanía, con «CARAS DE YO NO FUI». Porque va a ser inevitable que abunden los que intentarán colearse como políticos algunos «COCHOCHOS»
Estas consideraciones son pertinentes, ante el caso de la difusión de una carta pública dirigida a la nación, por la Vice Presidenta de la COMISION NACIONAL DE PRIMARIAS, y con base en cuyo contenido presentó su renuncia al cargo correspondiente. Pero, además, denunciando unas presuntas deslealtades, así como supuestas fallas operativas y funcionamiento de la Comisión.
Es necesario recordar que los miembros de la citada Comisión de Primarias (todos voluntarios) fue juramentada e instalada el 15 de noviembre del 2022. Tales miembros asumieron el compromiso de cumplir con el objetivo, razón por la que no hubo tapujos ni sorpresas. Lo sorprendente, sin embargo, fue que la Señora Vice Presidenta de la Comisión, a tan sólo unos días previos a su renuncia, dio unas declaraciones en la radio que, a su vez fueron retrasmitidas vía Digital por YouTube. ¿Con qué propósito?: ponderar y alabar efusivamente el trabajo y logros de la Comisión.
Extrañamente, sin que se hubiera aliviado el efecto positivo del razonamiento, es decir, sólo días después, y por motivos no descritos, exactamente el 26/7/2023), presentó su renuncia a menos de tres meses de cumplirse la meta de la Comisión (22/10/2023). Desde luego, lo curioso fue que lo hizo despotricando y aduciendo fallas y descalificaciones genéricas a personas de la oposición. Como diría el difunto y muy querido Presidente de Venezuela (1979-1984) Dr. Luis Herrera Campíns:
«QUÉ TARDE PIASTE, PAJARITO».–