España: IV Jornadas Inter-Asociaciones de la Federación Mundial de Obras Eucarísticas de la Iglesia

Les ofrecemos un resumen de lo vívido intensamente estos días.

Por la tarde del día 24 fue la Inauguración de las Jornadas en la Casa de Ejercicios de Toledo. Presidió el Señor Arzobispo, D. Francisco Cerro Chaves. Le acompañaron el Presidente del Consejo de la FMOEI, D. José Ángel Casero, el Consiliario Mons. Juan Miguel Ferrer, varios miembros del Consejo, y los sacerdotes Mons. Juan Sánchez Rodríguez y Don José Francisco Hernández Medina, E.P.

El presidente Casero dirigió unas palabras de saludo, recordando la finalidad y los objetivos de la Federación. Recalcó especialmente la futura participación de los miembros de la Federación en el Congreso Eucarístico de Quito. Recordó que cada uno de los allí presentes representaba una manera de vivir en torno a la Eucaristía y hacer de ella el eje de la existencia humana. Y señaló como también las Jornadas tienen el deseo de dar a conocer la figura de Doña Teresa Enríquez, cuyas virtudes heroicas han sido reconocidas recientemente.

 El Arzobispo de Toledo en sus palabras señaló que sentía muy alegre y feliz de estar presente en esa reunión de apertura de las Jornadas de la FMOEI, porque en su vida sacerdotal y pastoral siempre estuvieron muy presente ese tipo de asociaciones. “Entre otras razones porque el centro de nuestra Fe y el culmen es Jesucristo, muerto y resucitado, vivo en la Eucaristía. San Juan Pablo hablaba de esa triple dimensión: la eucaristía como Sacramento sacrificio, Sacramento comunión y Sacramento presencia. Vosotros vivís con mucha profundidad lo que es la Adoración Eucarística”. Para D. Francisco Cerro “es una alegría que se profundice en la figura de Doña Teresa Enríquez, una mujer, una mujer metida en los cargos políticos y sociales, que tuvo su influencia pero con una preferencia por los pobres, por los que sufren dándoles de comer a los hambrientos y ejerciendo las obras de Misericordia . Y esto es una oportunidad para revitalizar las Hermandades Sacraméntales que ella fundó”. Según el Arzobispo Primado lo que es esencial y propio del sacerdote es la centralidad de la Eucaristía y el perdón de los pecados, en la confesión y en la unción de los enfermos. Queremos impulsar en el Adviento el Sacramento de la Penitencia Don Francisco Cerro recordó que “una parroquia que no tiene la centralidad de la Eucaristía y del Corazón de Jesús… aquello está muerto. Si se expone el Santísimo la parroquia se va renovando. Lo mismo nos pasa a nosotros, la Eucaristía nos da fuerza, nos cambia la vida, nos cambia el corazón”. El Arzobispo Primado recalcó que si queremos vocaciones, adoremos al Señor Jesucristo Sacramentado. Y el tercer milenio será el Milenio de la Eucaristía sin lugar a dudas. San Manuel González decía que donde hay Eucaristía hay vida y donde no hay Eucaristía no hay vida. 

 Después de las intervenciones de representantes de varios carismas eucarísticos que explicaron su particular

sentido eucarístico: Adoración Nocturna Española, Asociación Nacional de Cofradías de Minerva y Heraldos del Evangelio, hubo una animada tertulia donde hablaron muchas personas. Se terminó con las palabras de Monseñor Ferrer Grenesche quien exhortó a los presentes a no perder la esperanza, ni tener una óptica negativa, pues en todas las nuevas realidades eclesiales que ahora atraen a la mayoría de los los jóvenes que van a la Iglesia está presente la Adoración y tengamos presente que en la Historia de la Iglesia han surgido momentos de adoración que cambiaron la historia y como decía Benedicto XVI el mundo está viviendo ahora un sunami eucarístico”. “En el mundo entero se han multiplicado las capillas de Adoración. En la noche después de la Eucaristía y la cena hubo una Vigilia de Adoración en la Capilla de la Casa Sacerdotal de Toledo, organizada por la Adoración Nocturna de Toledo. Sábado El programa del sábado comenzó con el Rezo de Laudes y la celebración de la Santa Misa presidida por Mons. Ferrer en la Capilla de la Casa de Ejercicios de Toledo. A continuación hubo dos charlas y una puesta en común de experiencias de diversos carismas eucarísticos.

La primera charla de la mañana estuvo a cargo del Rvdo. D. Juan Alberto Ramírez Avilés, delegado episcopal de Hermandades y Cofradías, Archidiócesis de Toledo y versó a respecto de la actualidad de las Hermandades Sacramentales. Don Juan Alberto invitó “a vivir este encuentro con gratitud, símbolo del gran don que es la propia Eucaristía, que de por sí, es la acción de gracias. Somos almas de Eucaristía. Somos llamados a ser centro y sentido último de la existencia humana. En la Eucaristía encontramos la fuerza, el alma y el corazón de toda la misión”. “Buscamos el futuro pero olvidamos las raíces, de modo que se ve muy bonito el árbol, pero, a veces, con pocas raíces, y buscamos la excusa de “nunca son buenos tiempos” y es el Señor quien pone los tiempos, de modo que tenemos que estar siempre atentos para que demos frutos, cuando el señor lo quiere, y no cuando nosotros pensamos que tenemos. Cuidemos la raíz. Vivimos aquél grito de Europa, sé tú misma, que decía S. Juan Pablo II, y Europa se ha cansado de creer, que nos decía Benedicto XVI”. El lugar donde se aprende a amar a Jesucristo es la cátedra de la Eucaristía. Centrándonos en la renovación del sacrificio de Cristo en la Eucaristía, el misterio central de la vida de la Iglesia. Conlleva siempre el espíritu de asociación, al ser para la iglesia universal, la triunfante y la militante. En el sagrario tenemos el punto donde tocamos y estamos heridos por la eternidad, donde entramos en misterio mismo de la eternidad de Dios. La Eucaristía hace nueva siempre a la Iglesia. Es la actualidad perenne de la Iglesia, la perennidad de la entrega de Cristo. ¿Puede haber actualidad mayor que esta? Todo tiempo se hace actual en la Eucaristía. La Misa, es siempre la misma, porque es la renovación del Sacrificio de Cristo. Está por encima de las modas, de los tiempos. Está por encima de todo, es la actualidad y modernidad de la Iglesia. En la epíclesis se une el tiempo del mundo entero, en su ayer, su hoy y su mañana, uniendo toda la eternidad en aquellas palabras: “Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección, ven, Señor Jesús.” “Para quererse hay que rozarse”, parafraseando al chavalín de Huelva que le decía a D. Manuel González en respuesta a su pregunta: ¿cómo tenemos que querer al Señor?”.

La segunda conferencia fue la Presentación del Congreso Eucarístico Internacional de Quito a cargo del Rvdo. P. Lino Emilio Diez Valladares SSS, Religioso Sacramentino, Miembro del Centro de Pastoral Litúrgica “Los congresos Eucarísticos son la primera gran manifestación multitudinaria de la Iglesia. Hoy en día han pasado a segundo plano, mientras que otras grandes manifestaciones de la Iglesia han adoptado una mayor notoriedad. El congreso ha de ser un momento de Sinodalidad, de fraternidad, de expresar la doctrina del Papa Francisco para ello.

Toda la información está en: https://www.iec2024.ec/el-congreso/ 

Es una llamada continua para vivir en, para y por Cristo. Es motivo de abarcar a todas las realidades de la Iglesia. Es una fuerte llamada a la fraternidad, a la unidad con todos los hermanos”.

 En la puesta en común de experiencias eucarísticas intervinieron representantes de Arpu, Archicofradía del Santísimo Sacramento de Torrijos y Adoradoras presenciales del Santísimo Sacramento con una interesante intervención del Padre Ernesto Postigó Pérez, SJ.

El programa de la tarde se dividió entre quienes debían participar de la Asamblea anual de la FMOEI en modo presencial y en modo on-line y los que no participando de la Asamblea, realizaron una visita de carácter cultural y religioso a la histórica Ermita del Cristo de la Vega en Toledo. La Asamblea se desarrolló con un saludo del Consiliario, Mons. Ferrer y las palabras del presidente, D. José Ángel Casero quien además leyó el informe anual de actividades de la Federación. Terminada la lectura del informe, todos los vicepresidentes de la Federación en Italia, México, EEUU, República Dominicana y otros países intervinieron de una manera muy amplia, dando a conocer sus actividades, realizaciones y proyectos. Cada vicepresidente comentó además como en sus país se estaba preparando el próximo Congreso Eucarístico Internacional de Quito en el año próximo.

Posteriormente en la Colegiata del Santísimo Sacramento de Torrijos y organizada por la Archicofradía del Santísimo Sacramento de esa Villa, se realizó el rezo de las Vísperas y la Vigilia Sacramental de Acción de Gracias por las Virtudes Heroicas de Doña Teresa Enríquez. Muchos fieles parroquianos y miembros de la Archicofradía se acercaron al templo para también ellos participar de la Vigilia. El lema de las Jornadas “La vida en torno a la Eucaristía” estuvo siempre presente en el corazón de todos.

La Jornada del domingo -XXXIV del tiempo ordinario, solemnidad de Jesucristo, Rey del Universo- comenzó con el Rezo de Laudes en la Capilla de la Casa de Ejercicios “El Buen Pastor de Toledo. A continuación Mons. Juan Miguel Ferrer Grenesche ofreció su magistral conferencia con el título de “Eucaristía Fuente de Fraternidad”, luego de la cual se llevó a cabo un coloquio sobre las materias tratadas. Mons. Ferrer destacó como la auténtica fraternidad tiene su fundamento en la Eucaristía, que Cristo Nuestro Señor, quiso instituir como sacramento de unidad, de caridad y de entrega total a los hombres, dándose a comer a sí mismo. Destacó que la fraternidad se puede concebir como una realidad natural, como un valor humano o como un don y una vocación para los cristianos. La Eucaristía debe ser vista como Banquete, Sacrificio y Celebración que es el Memorial del Señor. La Comunión Eucarística es pues la fuente de la verdadera fraternidad”.

Después de realizar una interesante visita guiada por las naves de la Catedral Primada, participaron los integrantes de la FMOEI de la Santa Misa que presidió el Excmo. y Rvdmo. D. FrancIsco Cerro Chaves, Arzobispo Primado de España. En su Homilía D. FrancIsco recordó que estaba muy contento de concelebrar con los sacerdotes hispanoamericanos -había un numeroso grupo- y con los que han participado en las Jornadas de la FMOEI y con los fieles que participaron de los actos “que con mucho fruto hemos realizado en las Jornadas InterAsociaciones” de la FMOEI para “aumentar los vínculos de quienes difunden el amor a la Eucaristía y para preparar el próximo Congreso Eucarístico Internacional que se llevará a cabo en Quito”. El arzobispo recordó a la venerable Doña Teresa Enríquez cuyo amor de locura por el sacramento se fundía en un amor profundo a los pobres. La Eucaristía es el pulmón -continuó Don Francisco- de Ia Iglesia. El oficio de Jesús es reinar, pero reinar cuando es mendigo de amor. Un reino que tiene por leyes las Bienaventuranzas. Cristo que está vivo y presente en la Eucaristía, en la Iglesia y en los pobres. Benedicto XVI recordaba que Nietzsche decía que Jesucristo había pervertido a la Humanidad, porque Jesús se identificó como mendigo con los pobres, con los sedientos, con los enfermos. La Eucaristía es Jesús, muerto resucitado y vivo. Hay una presencia real de Cristo en cuerpo, sangre alma y divinidad, y por esto es bueno que exista tantas Asociaciones que adoráis al Señor Sacramentado. Cuando encontramos a Jesús encontramos a Aquél que es quien nos da nuestra identidad. El anhelo del hombre es encontrar a Jesús y cuando se le encuentra en la Eucaristía nos impulsa a encontrarlo también en el servicio a los más pobres de los pobres”. El Señor Arzobispo volvió a insistir en la necesidad de la existencia de las Asociaciones que se dedican a la Adoración del Señor tan necesaria en nuestros tiempos. E invitó a todos a pasar a la Sacristía para hacer la foto de familia de clausura de las Jornadas.

Todos los participantes de esas IV Jornadas volvieron a sus lugares de origen con renovado entusiasmo y fervor eucarístico.-