Francisco: «Ya está preparado el lugar, quiero ser enterrado en Santa María Mayor»
Para 2024 «está asegurado uno a Bélgica, y hay dos largos pendientes: uno a Polinesia y otro a Argentina, que veremos cómo se da la cosa»
«Lo suyo es que el Papado sea hasta siempre, aunque existe esa posibilidad. Estuve con el ceremoniero preparando los ritos de las exequias del Papa, para simplificarlos bastante» «El nuevo ritual lo estreno yo»
«Acabo de hablar con Gaza, todos los días llamo a la parroquia. ¿Qué ganamos con las guerras? Destrucción. Puedo afirmar sin equivocarme que desde el fin de la II Guerra Mundial hasta hoy, siempre hubo alguna guerra por ahí»
«Siempre me ayudó, fue muy generoso en esto», relata Bergoglio, quien relató su despedida de Ratzinger. «Un grande, Benedicto era un grande. Un hombre humilde y sencillo, que cuando se dio cuenta de sus límites tuvo la valentía de decir basta»
«Necesito que recen por mi salud: la vejez no se maquilla». Claro y sin filtros, el Papa Francisco ha concedido una entrevista a la veterana Valentina Alazrraki para NMás, en el que, entre otras cosas, deja claro que, por el momento, no renunciará, que para 2024 sólo está claro un viaje a Bélgica, y que siguen en el aire su ansiada visita a Argentina y otra a Polinesia, y que ya tiene decidido el lugar en el que será enterrado: Santa María la Mayor, junto a la Salus Populi romana. Que nadie se asuste: «Me siento mejor, bastante bien».
«Hay que saber aceptar los dones de la vejez, aceptar que uno puede hacer mucho bien desde otra perspectiva», sostiene el Papa, que admite que «ahora los viajes ahora están repensando todos, sobre todo los más lejanos». Por el momento, para 2024 «está asegurado uno a Bélgica, y hay dos largos pendientes: uno a Polinesia y otro a Argentina, que veremos cómo se da la cosa«.
Sobre su renuncia, Francisco valoró la decisión de Benedicto «como ejemplo» pero que sólo dirá «basta, cuando él quiera». «Lo suyo es que el Papado sea hasta siempre, aunque existe esa posibilidad. Estuve con el ceremoniero preparando los ritos de las exequias del Papa, para simplificarlos bastante«. «El nuevo ritual lo estreno yo», bromeó, añadiendo, más en serio, que «como siempre le prometí a la Virgen, ya está preparado el lugar: quiero ser enterrado en Santa María Mayor, es mi gran devoción (…). Hay una ligazón muy grande».
Un año después de su muerte, el Papa valoró su «cercanía» con el Papa Benedicto. «Siempre me ayudó, fue muy generoso en esto», relata Bergoglio, quien relató su despedida de Ratzinger. «Un grande, Benedicto era un grande. Un hombre humilde y sencillo, que cuando se dio cuenta de sus límites tuvo la valentía de decir basta».
«A algunos hay que pegarles un poquito»
¿No es cierto que se haya vuelto más duro?, le pregunta Alazrraki: «Bueno, a algunos hay que pegarles un poquito, porque a veces hace falta alguna reprimenda, pero la gente es buena acá dentro, y mira que yo soy complicado e impaciente, y me aguantan. La gente de la Curia es muy buena».
Sobre Milei, Bergoglio quiso rebajar la tensión. «Hay que distinguir mucho entre lo que dice un político en campaña electoral, y lo que va a decir después». Finalmente, sobre las guerras en Ucrania o Gaza, Francisco lamenta que «nos hemos acostumbrado, y en Ucrania muere gente». «La gente siempre es una derrota, siempre. Los únicos que ganan son los fabricantes de armas».
«Acabo de hablar con Gaza, todos los días llamo a la parroquia. ¿Qué ganamos con las guerras? Destrucción. Puedo afirmar sin equivocarme que desde el fin de la II Guerra Mundial hasta hoy, siempre hubo alguna guerra por ahí», finaliza el Papa, quien también habla de migraciones, de la violencia en México y de la Virgen de Guadalupe.-