Mons. Báez celebra entre lágrimas la liberación del Obispo nicaragüense Rolando Álvarez
Sin poder contener la emoción y las lágrimas, Mons. Silvio José Báez confirmó hoy la noticia de la liberación de dos obispos —entre ellos Mons. Rolando Álvarez—, 15 sacerdotes y dos seminaristas, que fueron deportados por la dictadura de Daniel Ortega con rumbo al Vaticano: “Este es el poder de la oración del pueblo de Dios”.
Como se conoció inicialmente a través de medios nicaragüenses, Mons. Rolando Álvarez, Obispo de Matagalpa; Mons. Isidoro Mora, Obispo de Siuna; y otros sacerdotes y seminaristas, fueron liberados y deportados por la dictadura que encabeza Daniel Ortega junto a su esposa Rosario Murillo en Nicaragua.
La cifra originalmente difundida por la prensa local fue de dos obispos, 13 sacerdotes y tres seminaristas. Un comunicado de la dictadura de Ortega publicado posteriormente incluyó un listado definitivo en el que figuran, además de los dos prelados, un total de 15 presbíteros y dos seminaristas liberados.
Al finalizar la celebración de la Eucaristía en la iglesia de St. Agatha, en la Arquidiócesis de Miami (Estados Unidos), Mons. Báez, que tuvo que exiliarse a causa de la persecución y las amenazas del régimen de Ortega en abril de 2019, anunció que “fueron liberados los 2 obispos, Mons. Rolando Álvarez, que tenía más de 500 días de estar en la cárcel; y Mons. Isidoro Mora”, así como los sacerdotes y seminaristas que tenía secuestrados la dictadura.
“Yo cuento esto con profunda alegría”, aseguró el prelado nicaragüense. “Lo cuento también para que le demos gracias al Señor, este es el poder de la oración del pueblo de Dios”.
“La dictadura sandinista criminal de Daniel Ortega no ha podido contra el poder de Dios”, resaltó.
Mons. Báez compartió luego que desde esta mañana comenzó a tener informaciones tanto desde Roma como desde Washington D.C. (Estados Unidos) y Managua (Nicaragua). “Hoy está confirmado”.
El prelado insistió en que tanto los obispos como los sacerdotes y seminaristas detenidos y hoy deportados por el régimen de Ortega “eran inocentes”.
Todos ellos “han aterrizado en el aeropuerto Fiumicino de Roma y han sido acogidos por la Santa Sede”, precisó.
Mons. Báez hizo luego una invitación a todos los católicos “a que le demos gracias al Papa Francisco por su interés, su cercanía y su cariño por Nicaragua, y por la eficacia de la diplomacia vaticana”.
“Gracias al Señor y gracias a la Santa Sede hoy celebramos esta gran alegría”, expresó.
“Ha sido una muestra del poder de la oración del pueblo de Dios. Y también de todo el esfuerzo de la presión internacional que se ha hecho sobre esta dictadura irracional y criminal. Y sobre todo de la sabia y fina actuación de la diplomacia del Vaticano”, reiteró.-