Políticas Económicas y Elecciones Presidenciales

José Antonio Gil Yepes:

Según la Encuesta Omnibus Nacional de Datanalisis, mayo 2024, para el 68% de los encuestados el principal problema del país es económico: “la inflación, el sueldo no me alcanza, desempleo, etc.” A lo que se suma que el 18% señala que el principal problema se refiere a los servicios públicos, en particular la electricidad y el agua. A diferencia de otros momentos en que la delincuencia ha sido el principal problema, los de tipo económico afectan a casi toda la población y explican los bajos niveles de aprobación de gestión y de intención de voto por el presidente NM. La respuesta lógica y casi que ineludible sería implementar políticas que recuperen la economía.

Por otra parte, la VII Encuesta Multisectorial Empresarial de Escenarios Datanalisis, abril 2024, nos permite identificar cuales son las peores y mejores políticas económicas que inciden sobre la marcha de las empresas.

Las políticas económicas que peor efecto tienen sobre las empresas son, en orden de prioridad, la falta de crédito bancario (en divisas, luego en bolívares), los altos impuestos nacionales y municipales, la sobrevaluación del bolívar, las fallas eléctricas, la escasez de combustible, el contrabando y la competencia desleal. En particular, los altos impuestos y la falta de crédito bancario son una especie de “operación pinza”, como se dice en la guerra, cuando se ataca al otro desde dos flancos para dispersar sus recursos. Esta “pinza”, junto con las fallas eléctricas y la escasez de combustible, afecta a todas las empresas, de todos los sectores y tamaños. En el caso de la producción, agro, cría, agroindustria e industria, la “pinza tiene cuatro flancos, en vez de dos, pues estos sectores tienen, además, que enfrentar la sobrevaluación, el contrabando y los ilícitos aduaneros.

La combinación de escaso crédito bancario y altos impuestos nacionales y municipales reafirman una política antiinflacionaria de restricción de liquidez que ya dio lo que podía dar, pero no da para bajar la inflación anual a un dígito y arruina a la población y las empresas. Para lograr bajar la inflación a un dígito se necesita un paquete de políticas económicas enfocado a estimular la inversión privada, mayor oferta de productos y servicios, lo cual, a su vez, incrementaría el empleo, los salarios, el consumo y el bienestar de los ciudadanos. Entonces, las políticas que reactivarían la economía son bajar los Encajes para recuperar el crédito; sustituir el enfoque basado en cobrar altos impuestos a los pocos que quedan por cobrar bajos impuestos a muchos; corregir la sobrevaluación manteniendo un crawling peg y, sobre todo, estimulando la inversión en tecnología para incrementar la productividad de las empresas; seguir atacando el contrabando y los ilícitos, cosa que, afortunadamente, está ocurriendo según arrojan los resultado de la arriba mencionada

Encuesta Multisectorial Empresarial de Escenarios Datanalisis. Lo cual implica que la recién nombrada Comisión de Alto Nivel Contra el Contrabando y los Ilícitos está haciendo su trabajo.

Cuando se presente la posibilidad de corregir los desequilibrios de la economía, no lo hagamos a través de los llamados ajustes de la economía ni renegociando deudas. Eso ya lo hemos hecho, con resultados inútiles. La deuda externa pública se paga vendiendo las empresas del Estado. Lo que necesitamos es reestructurar la economía. La clave son disciplina fiscal y una privatización integral que incluya a inversionistas capitalistas capacitados (muchos entrarían bajo la modalidad de reconversión de deuda en capital),  a trabajadores de las empresas a privatizar; y al público al colocar parte de las acciones a través de la Bolsa de Valores. El Global Impact Investing Network ofrece créditos para financiar a los compradores más modestos. Así recuperaríamos la electricidad, el agua, la gasolina, entre tantos otros bienes y servicios hasta ahora no producidos por sus propietarias: las Empresas del Estado.-

@joseagilyepes