No podemos quedarnos en la indiferencia, dijo el Monseñor Oswaldo Araque desde el Tocuyo
El administrador apostólico de la Arquidiócesis de Barquisimeto, estado Lara, Monseñor Owaldo Araque, ofició la misa central de la festividad de San Antonio de Padua, patrono de El Tocuyo, en la que exhortó a los feligreses y devotos del santo a no ser indiferentes ante las necesidades y realidades del otro. Hermanos, no podemos quedarnos en la indiferencia, debemos movernos con el otro, basta de indiferencia, les invito a la fraternidad, a consolidar proyectos que ayuden al otro, les invito a devolver la dignidad al hermano, expuso monseñor en su homilía de la eucaristía que inició pasadas las ocho de la mañana en la iglesia San Francisco de la capital morandina.
El también obispo de la Diócesis de Guanare, acompañado de los sacerdotes de El Tocuyo, destacó, además que la invitación que hacía la iglesia el día de ayer era a conocer la vida de Dios en él (San Antonio), enfatizando que no pueden salir de la persona que no busca palabras de sabiduría ni el deseo de santidad, mientras que en San Antonio se encuentra una vida de caridad, de humildad, de servicio y entrega.
La celebración de la misa estuvo amenizada por golpes tocuyanos que unificaron la religiosidad con el folclor. Al momento de presentar las ofrendas, los fieles entregaron el pan de San Antonio para que fuera bendecido por el obispo, para luego ser entregado a los pobres y enfermos de la población.
Inicia con la batalla
Con el primer charrasqueo del cuatro que hacía entrada al son de La Batalla y con las indicaciones del capitán mayor, la imagen de San Antonio salió en hombros de sus devotos a recorrer las calles del pueblo entre bailes, pago de promesas y un ambiente de mucho fervor.
La señora Liliana Soto acompañada de su hija que padece distrofia muscular progresiva, esperaban el paso de la procesión para implorar a Dios por la salud de la pequeña, quien de la noche a la mañana dejó de caminar. Dijo tenerle mucha devoción al santo, esperando el milagro por su intercesión.
Así también caminaba la procesión la señora Carmen de Querales, ataviada con un traje de bailadora de tamunangue, con tela estampada de flores, dijo que desde los 10 años acompaña a San Antonio, le baila y pide favores para ella y su familia.
Al paso de dos cuadras se detenía la procesión en un altar frente a una casa para tocar un son de los siete que compone el tamunangue. Los cultores, con la señal de la cruz, arrancan el baile sin perder de vista la imagen del santo. Los organizadores del altar reparten agua, el pan bendito y dulces.
Piden por las cosechas
El momento fue también propicio para que los productores agrícolas con muestras de los productos labrados en sus tierras pidieran a San Antonio por la nueva temporada de cosechas que inicia a mediados del mes de junio.
Es una tradición que nos identifica a los productores, el altar este año luce frutas y hortalizas en señal de nuestro trabajo que es ofrendado a Dios y a San Antonio, mi esposo y yo hemos escogido los mejores frutos para darlos en ofrenda de petición a nuestro patrono para que nos vaya bien, resaltó María Escalona.
A la celebración asistieron personajes destacados del país, como la periodista Valentina Quintero y la Miss Venezuela 2015, Mariam Habach.-
Jhonny Pérez – La Prensa Lara