Confidencial y gratuito. Ese es el carácter de la línea telefónica de ayuda que la Escuela de Psicología de la UCAB desarrolló para el bienestar emocional de los venezolanos. Desde su puesta en funcionamiento, en agosto de 2024, PsicoLínea UCAB ha atendido alrededor de 100 llamadas de ciudadanos que requieren apoyo puntual e inmediato.
Cada jueves, de 8:00 am a 5:00 pm, psicólogos de la universidad escuchan y ofrecen primeros auxilios psicológicos y orientación a quienes se comunican a través de los dos números dispuestos para este fin: 0414-121.7882 y 0424-172.3981. Según apuntó el director de la Escuela, Danny Socorro, S.J., la atención brindada es primaria.
«Atendemos en casos de crisis y ofrecemos primeros auxilios psicológicos. Es decir, en momentos donde la persona se siente tan desbordada que no se puede autocontrolar y no es ella misma. Cuando está superansiosa, con miedo, con ganas de llorar, cuando las emociones del momento pueden más; y, sobre todo, cuando sienten que no pueden funcionar, ser productivos porque están fuera de sí o cuando quieren autolesionarse. Ahí trabajamos nosotros. Con estas llamadas la idea es que la gente pueda desahogarse, sacar sus miedos; se trata de una intervención breve que buscar estabilizarlo para que pueda buscar ayuda. Nosotros, incluso, podemos referirlos a otras instancias que prestan servicio psicológico», afirmó el sacerdote jesuita.
PsicoLínea UCAB: soporte esencial en momentos de incertidumbre
Socorro explicó que PsicoLínea UCAB forma parte del Programa de Prevención del Suicidio que lleva adelante la Escuela y surgió como una alternativa concreta de apoyo a la población, tras el análisis de resultados de PsicoData, estudio realizado por esta dependencia sobre la situación psicosocial del venezolano que ha identificado factores de riesgo para la salud mental, entre ellos ansiedad y depresión.
La iniciativa también es producto de la información recogida en los campamentos de intervención psicológica que la dependencia académica ucabista ha realizado en varias partes del país.
«Tanto en Psicodata como en las visitas a diferentes partes del país, el tema del suicidio estaba apareciendo constantemente. Nos encontramos una realidad muy dura y no podíamos quedarnos de brazos cruzados«, mencionó el jesuita.
El doctor en Psicología señaló que, en su primer mes de funcionamiento, uno de los principales motivos de consulta a PsicoLínea UCAB fueron la incertidumbre, el miedo y la angustia generados por la situación social, política y económica nacional.
Agregó que personas con cuadros psicológicos previamente diagnosticados, que están transitando por un momento difícil y que no cuentan con los recursos necesarios para asistir a un centro de salud privado, también hacen uso del servicio.
«Por un tema de organización comenzamos después de las elecciones (presidenciales del 28 de julio). No nos imaginamos la situación crítica, así que vino como anillo al dedo. Quisiera insistir en que es un servicio confidencial y gratuito porque siempre hay miedo y más en estos tiempos», dijo.
El sacerdote jesuita recalcó que la línea telefónica trabaja con expertos para orientar y estabilizar a las personas que así lo requieran. Apuntó que el servicio busca darle continuidad al trabajo que ejecuta la Federación Venezolana de Psicólogos con su línea homóloga, la cual funciona de viernes a domingo. «La mayoría de las llamadas se reciben los fines de semana, así como los feriados. Pareciera que son momentos de mayor necesidad, de mayor soledad, hay diferentes variables», indicó.
Por ello, su expectativa es que -con el presupuesto necesario- se logre ampliar los días de atención de PsicoLínea UCAB. Pidió a los usuarios que, dada la alta demanda, sigan insistiendo hasta que su llamada sea respondida. «No desistan», recomendó.
«Solo con salud mental se previene el suicidio»
Cada 10 de septiembre se conmemora el Día Mundial para la Prevención del Suicidio, fecha instituida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para llamar la atención sobre este problema de salud pública que constituye la cuarta causa de muerte entre las personas de 15 a 29 años.
Según la OMS, 700 mil personas se quitan la vida cada año en el mundo; Venezuela no escapa a esta realidad. De acuerdo con estadísticas del Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), la tasa de suicidios en el país se ubicó en 8.2 por cada 100 mil habitantes en 2023, un aumento de 6.5 % respecto a 2022. La causa mayoritaria de los suicidios, según el OVV, es la depresión y son los hombres quienes más atentan contra su vida (más del 80% de los casos).
El director de la Escuela de Psicología ucabista destacó que la bandera de la PsicoLínea UCAB, así como de todas las actividades de apoyo que realizan desde esa instancia, es concientizar sobre la importancia de promover la salud mental porque «solo con salud mental se previene el suicidio». «La salud mental es lo que nos mantiene en estos momentos de tanta incertidumbre y tanta situación crítica», aseveró.
El experto recordó que, según PsicoData 2024, tan solo 9.6% de los venezolanos busca ayuda con profesionales de la salud mental. Aunque los prejuicios y estigmas respecto a asistir a terapia psicológica y psiquiátrica siguen siendo causas importantes de esta realidad, advirtió que otro factor considerar es la poca oferta que existe desde el sistema público de salud y la incapacidad económica de la población para acceder a los servicios que se ofrecen desde el ámbito privado.
«En ocasiones no tiene que ver con que la persona no quiera ir o si piensa que ir al psicólogo es de locos, sino porque no tiene los medios. No es fácil pagar hoy día una consulta psicológica privada, porque los servicios a nivel público no están en condiciones. Por ejemplo, en Parque Social de la UCAB tenemos la UPLA (Unidad de Psicología Padre Luis Azagra) y está supercolapsada, no se dan abasto los psicólogos. Pasa algo parecido en el CADH (Centro de Asesoramiento y Desarrollo Humano de la universidad) donde tenemos que remitir a los usuarios a grupos. Es mucha gente necesitada, sobre todo en el contexto país, de estrés postraumático mantenido», afirmó.
¿Cómo ayudar? Superando algunos mitos sobre el suicidio
El suicidio es un fenómeno social que está rodeado de diferentes mitos. El primero de ellos es que quien quiere quitarse la vida no lo anuncia. Según Danny Socorro, esto está lejos de la realidad porque los suicidas manifiestan su intención de distintas formas, no siempre directas. «Decir que estoy deprimido en muchos contextos sociales no está bien visto y, entonces, es preferible callarlo», dijo.
Por ello, llamó a quienes están alrededor de alguien en situación de depresión a mantenerse atentos para identificar cambios a nivel cognitivo (pensamiento, ideas), a nivel afectivo y a nivel conductual que puedan representar señales de alerta.
«No significa que si aparece uno de ellos quiere decir que la persona se va a suicidar. No. Más bien hay que verlo como un conjunto y estar atentos porque puede haber desde una ideación hasta la planificación. A nivel cognitivo, las ideas de inutilidad invaden a la gente ‘ya yo no sirvo’, ‘estoy sobrando’ ese tipo de pensamientos -incluso intrusivos- son alertas. A nivel afectivo, son personas que comienzan a llorar mucho, que tienen pensamientos reiterativos, que sienten que no pueden controlar sus emociones. Las despedidas sutiles. Al final son cosas que hacen notar que no eres tú mismo», dijo.
Otro mito tiene que ver con etiquetar a la persona que se quitó la vida como héroe o cobarde. «No es ninguna de las dos. Es una persona desbordada por el sufrimiento y es tanto que lo quiere apagar de cualquier forma y no le importan los medios para hacerlo», puntualizó el especialista.
Ante esta situación, el director de Psicología UCAB destacó la importancia de ofrecer apoyo y escuchar, más que brindar palabras de aliento, pues en ocasiones -y sin intención- se podría lastimar aún más a la persona afectada. «Decirle ‘por qué estás así, si tú eres una persona afortunada: tienes hijos, tienes todas las posibilidades. ¡Date cuenta de todo lo que tienes!’ puede ser bienintencionado, pero resulta como un latigazo para esa persona que está tan afectada».
Socorro insistió en documentarse sobre primeros auxilios psicológicos. «Una persona con un proceso de depresión está fuera de sí: hay unos procesos bioquímicos, psicológicos y un contexto que muchas veces contribuye. Al final la gente tiende a aislarse y a callarse. Es importante saber qué decir y ahí está la importancia de los primeros auxilios psicológicos. A veces es mejor dar un buen abrazo y decirles ‘yo estoy contigo, a la orden, desahógate todo lo que quieras’. Se trata de captar las señales de alerta, pero también saber cómo intervenir y darle un espacio donde se sienta seguro, valorado y comprendido», afirmó.
Resiliencia para tiempos difíciles: el valor del autocuidado
Además de PsicoLínea UCAB, los campamentos psicosociales de apoyo y el estudio Psicodata, el padre Danny Socorro adelantó que la Escuela de Psicología se encuentra desarrollando un mapa interactivo donde las personas podrán conseguir -estado por estado- los nombres y datos de contacto de profesionales de salud mental, instituciones y organizaciones que ofrecen servicios de psicología o psiquiatría de manera gratuita o a bajo costo. Acotó que esperan publicar este mapa en noviembre de este año.
Recordó que la Escuela viene ofreciendo, desde la cuenta @Psicología-UCAB en Instagram, información útil y consejos de apoyo y autocuidado en pro del bienestar mental y emocional.
Como parte de las estrategias de autocuidado y ante los momentos que vive el país, el profesor insistió que es importante que la población trabaje en retomar rutinas como volver al trabajo o a las actividades académicas, y que busque preservar -en la medida de lo posible- los hábitos de sueño, higiene personal, alimentación y esparcimiento o recreación.
Aclaró que no se trata de normalizar o negar los problemas, sino de un ejercicio de resiliencia. «Es el momento de la resiliencia, no es momento de la resistencia. Porque la resistencia dura apenas uno o dos meses y terminas con fatiga y te desgastas psicológicamente y hundido en la desesperanza. Entretanto, la resiliencia tiene un elemento de resistencia, pero es mucho más que eso. Implica no rendirse», concluyó Socorro.
Texto: Grace Lafontant León (Comunicaciones UCAB)
