Iglesia Venezolana

Arzobispo de Caracas destaca la importancia de la sinodalidad en el Congreso Eucarístico Internacional

Este jueves 12 de septiembre Mons. Raúl Biord Castillo, SDB, Arzobispo Metropolitano de Caracas, tuvo su participación en un panel integrado por 4  agentes pastorales de la Iglesia Católica pertenecientes a Taiwán, Suiza y él por Venezuela. El espacio tuvo como tema central el proceso sinodal que se vive en las comunidades eclesiásticas, esto en el desarrollo del 53° Congreso Eucarístico Internacional con sede en Quito, Ecuador.Mons.

Biord inició su intervención indicando que agradece la invitación del Papa Francisco a entrar, con este encuentro, en un proceso de sinodalización, de hacer de la Iglesia, más sinodal. Se refirió también a la experiencia venezolana, que, sin llevar la palabra Sinodal en su momento, se acercaron bastante a esto con la celebración del Concilio Plenario de Venezuela, realizado en el país por fases, durante 10 años, a finales de los 90 principio del año 2000, y que permitió crear una comunión en el proceder de la Iglesia venezolana, donde se reconocieran en un único proyecto: escuchar y caminar juntos construyendo comunión para lanzarse a la misión. “No podemos pretender, en seguida, llegar a la Eucaristía sin un proceso de iniciación cristiana y de inserción en una comunidad” enfatizó Mons. Raúl Biord, Arzobispo de Caracas.

Desarrolló la idea de que la Eucaristía es el cuerpo de Cristo, a pesar de que algunas falsas espiritualidades reducen la Eucaristía al cuerpo sacramental de nuestro Señor Jesucristo. Ha dicho que quien reduzca su espiritualidad eucarística al cuerpo sacramental de Cristo y no se sienta enviado a reconocerse parte de un cuerpo místico de un cuerpo eclesial y a servirlo en el cuerpo de los pobres, traiciona a la Eucaristía.

Por último, manifestó que el Congreso ha sido una experiencia de Dios, del Espíritu y de Iglesia, porque los ha reunido de diferentes continentes, en torno a la Eucaristía, para salir enviados e ir a las periferias del mundo. Culminó invitando a salir juntos a predicar la alegría del Evangelio. –

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