Mafia
Una nación sojuzgada por la mafia, en una o varias variantes, tiene el desafío de liberarse

Fernando Luis Egaña:
La mafia es delincuencia organizada, o cómo dicen los expertos: criminalidad organizada. Su empeño es el control delictivo de una actividad o de un territorio, o de ambos, para el enriquecimiento y también para el ejercicio del poder criminal.
La mafia tiene sus capos, sus sicarios, sus operadores financieros, y tiene a sus beneficiarios políticos, económicos y sociales. Las mafias pueden llegar a ser tan poderosas que manejan a países enteros, con la complicidad o resignación de gran parte de las «elites»…
Las mafias compiten por el control supremo, y no conocen límites para alcanzar sus objetivos. Por lo general sus cepas son conocidas como cárteles. Hay cárteles que le declaran la guerra al Estado, hay otros que llegan a acuerdos funcionales, y hay otros cárteles que constituyen al Estado.
Las mafias operan en círculos concéntricos. Desde el principal o los principales capos hasta los grupos de subordinación y complicidad importante. Todos ellos son mafiosos perpetuos. Mafia o muerte.
La mafia es sanguinaria. La vida no vale nada si no es un objeto utilitario. Puede tener muchas apariencias, muchas dimensiones, muchos mafiosos de cualquier proceder.
La mafia es destructiva. Corrompe lo que toca y depreda de manera implacable. Una nación sojuzgada por la mafia, en una o varias variantes, tiene el desafío de liberarse. No es fácil pero sí es posible y obligante.-