¿Por qué agosto se dedica al Inmaculado Corazón de María?
Originalmente, agosto tenía una fiesta al Inmaculado Corazón de María que respondía a la Segunda Guerra Mundial y a las revelaciones de Fátima

En la Iglesia católica crecieron con el tiempo «devociones» específicas que se asignaron a cada mes del año. Por ejemplo, el mes de junio se asoció con el Sagrado Corazón de Jesús porque la fiesta del Sagrado Corazón siempre cae dentro de ese mes. Agosto pasó a ser conocido como el mes dedicado al Inmaculado Corazón de María.
Pero actualmente es difícil saber a qué se debe. No existe ninguna fiesta particular en agosto en el calendario litúrgico actual y la principal celebración de agosto es la Asunción de la Virgen María el 15 de agosto.
La razón principal por la que agosto se asoció al Inmaculado Corazón de María es la Segunda Guerra Mundial y la devoción del Papa Pío XII a Nuestra Señora de Fátima.
Inmaculado Corazón de María
El mundo estaba convulsionado en la década de 1940 y, en 1942, el Papa Pío XII respondió a las peticiones de Nuestra Señora de Fátima y consagró el mundo al Inmaculado Corazón de María el 31 de octubre de 1942.
Cuando la guerra continuó, Pío XII se volvió de nuevo hacia el Inmaculado Corazón.
El 4 de mayo de 1944, el Papa Pío XII instituyó la fiesta del Inmaculado Corazón de María el 22 de agosto, octava de la fiesta de la Asunción. Lo hizo para que por su intercesión se obtenga «la paz entre las naciones, la libertad de la Iglesia, la conversión de los pecadores, el amor a la pureza y la práctica de la virtud.»
Este siguió siendo el día dedicado al Inmaculado Corazón de María hasta después del Concilio Vaticano II.
Tras la revisión del Calendario General, el Papa Pablo VI decidió intercambiar las fiestas del Inmaculado Corazón y de la Realeza de María. La fiesta del Inmaculado Corazón de María se unió a la del Sagrado Corazón de Jesús (que se celebra el sábado siguiente a la fiesta del Sagrado Corazón, normalmente en junio) y la de la Realeza de María se trasladó al 22 de agosto. Esto se hizo en parte para reconocer el hecho de que el reinado de María está estrechamente relacionado con el de su Asunción al cielo.
Incluso después del traslado de las fiestas, muchos católicos siguieron celebrando agosto como mes dedicado al Inmaculado Corazón de María, pues consideraban que su mensaje de Fátima debía ser escuchado de forma más amplia.
Esta designación de agosto no es un tema espiritual «oficial» decretado por la jerarquía católica, sino simplemente un desarrollo histórico que surgió de la Segunda Guerra Mundial y del mensaje de Nuestra Señora de Fátima.-
Philip Kosloski – publicado el 04/08/25-Aleteia.org