Opinión

Oswaldo Páez-Pumar: Todos contra Israel

Había pensado que la primera frase en este artículo sería “no salgo de mi asombro”. Sin embargo, como he visto, oído y leído, sobre el ojalá (cristianización o castellanización del “Oh Alá”) creo que la primera frase más bien sería que “ojalá cese el enfrentamiento entre palestinos e israelitas”. No puedo menos que preguntarme a mí mismo si será posible que cese ese enfrentamiento, o si por el contrario el enfrentamiento a los israelitas va más allá, mucho más allá del enfrentamiento entre palestinos e israelitas. Creo que sí.

La civilización de la cual somos parte, nos guste o no, es la civilización judeo-cristiana. Desde luego la acompañan muchos otros valores civilizatorios, digamos solo para ejemplificar, sin que nuestros ejemplos sean tomados como excluyentes de otros muchos aportes que ni son judíos, ni mucho menos cristianos, allí está nada menos que la numeración arábiga, que realmente no es arábiga, porque se origina en la India.

Como quién me lea podrá imaginar, o más bien captar, la presencia de los judíos fuera del estado de Israel o aún más claramente  la existencia de ese estado y su población mayoritaria radicada allá es un ¿fenómeno extraño?

De niño, cuando comenzaba mis primeros cursos de historia, me preguntaba ¿por qué todo comienza con un pueblo que erraba y de una u otra manera se asentaba de repente en algún lugar y hacía surgir una civilización? ¿Por qué no la hacían surgir en donde estaban? ¿Fue distinta la presencia de los israelitas guiados por Moisés en lo que es hoy esa tierra de confrontación? Si respondemos positivamente ¿son los aztecas y las otras etnias que poblaban, para reducir el espacio a Guatemala y México, quienes tienen derecho a expulsar a todos los que hablen castellano? Preguntémonos si también en Ecuador, Perú y Bolivia son los que precedieron a Colón y con él a nuestra lengua los que tienen el derecho a dirigir una sociedad que la conforman ellos y excluyen a los recién llegados, porque como es sabido el hombre, el ser humano, no es originario de América, como alguien trato de proponerlo (Ameghino).

Entonces parece claro -al contrario, oscuro- que el derecho a asentarse algún pueblo en algún territorio forme parte del derecho de toda comunidad a subsistir. ¿Sólo está vedado a los judíos? Me parece que también está negado a los armenios.

Desde el mismo momento cuando las Naciones Unidas, rectifico, cuando una mayoría de naciones  reconocieron el Estado de Israel, afortunadamente Venezuela estuvo entre quienes lo hicieron; ¿pudo concebirse un “Estado” sin uno de los elementos necesarios para su existencia como es “un territorio”? Desde luego que no.

Ahora el estado de Israel ha enfrentado varias confrontaciones en un espacio de, digámoslo en palabras llamativas, tres cuartos de siglo, para sobrevivir a los ataques que están orientados a acabar con su existencia y que se consideran por muchos países miembros de la ONU, como el derecho del pueblo “palestino” al territorio que forma parte del Estado de Israel.

Por eso me pregunto y les pregunto a quienes me lean. ¿Israel en estos 75 años ha iniciado una guerra de conquista para hacer crecer su territorio? Desde luego que no, lo único que ha obtenido es respeto por su “respeto” al orden jurídico, mientras algunos “imbéciles” le reclaman frente a un ataque, ni siquiera precedido del alerta de “te voy a atacar”, que debe Israel abstenerse de atacar los lugares desde los cuales se inicia la agresión, no obstante de haber prevenido a la población civil, tras la cual se escudan los agresores. Creo que escribiré algo más sobre este tema, sin poner después de la fecha “continuará”.

Caracas, 30 de mayo de 2021

Publicaciones relacionadas

Un comentario

  1. Ya que he leído este artículo de Oswaldo Páez Pumar y siendo yo descendiente de judíos Sefarditas, aun cuando soy Católica de alma y corazón;
    Quisiera preguntar:
    a que se debe ese odio ancestral contra el pueblo Judío, que desde los tiempos de Adán y Eva
    han sido perseguidos, expulsados, asesinados, masacrados, generación tras generación hasta que finalmente al culminar la II Guerra Mundial se decreta el Estado de Israel y se les permite asentarse en la tierra que originalmente era de ellos; para luego comenzar las famosas guerras de los palestinos contra los judíos y que nunca parecen terminar; es un estado de 75 años- yo estaba por nacer cuando esto sucedió.
    Por que los odian tanto, cuando a pesar de todo esta gente es trabajadora, han logado grandes cosas en un terreno mínimo y sin grandes recursos, como por ejemplo lo que tiene – o mejor dicho tenia Venezuela que lo han destrozado por ambición y odio haca el venezolano; tienen una educación muy buena, han logrado muchas hazañas en casi todas las ciencias que se conocen: solamente hacer fértil un desierto es algo maravilloso.
    A que se debe esa envidia, ese odio, esas ganas de destrucción de un pueblo que ha luchado por siglos por su tierra y su religión, antecesora de la mía. Creen Uds que merecen ese trato? Donde esta la caridad cristiana, Protestante, Hinduista etc etc.?? Podría alguien explicarme porque esto? y no me salgan con el cuento de que ellos mataron a Jesucristo; Dios ya tenia planeado eso y el sabia que sería así; pero nunca deseo que a este pueblo se le persiguiera de por vida, se le odiara tanto. Es algo sin razón ni lógica.
    Por eso le pido a los que creen que saben que me expliquen. Gracias por leer esto. Espero respuesta.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Mira también
Cerrar
Botón volver arriba