In Memoriam: Padre Alexandre Joao Mendonca de Canha
Cardenal Baltazar Porras Cardozo:
El 13 de octubre, fecha emblemática para los devotos de la Virgen de Fátima, uno de sus más fieles seguidores pasó a la casa del Padre. El presbiterio de Caracas, la comunidad lusitana y sus muchos amigos y fieles, sienten su partida pues perdemos a un hombre de Dios, sencillo, alegre, servicial, desprendido, que encontró en la vocación sacerdotal la realización plena de su existencia. Nació el 19 de octubre de 1954, en la parroquia San Pedro, en Funchal, Madeira, Portugal. Alexandre llegó a Venezuela con apenas 13 años de edad y desde joven comenzó a trabajar por el desarrollo del país. Trabajó como gerente de la extinta cadena de Supermercados Sorocaima, cuando decidió entrar al Seminario. Tuve la dicha de recibirlo en el San José de El Hatillo. Como toda nueva experiencia le tocó aprender esta nueva andadura que la asumió con coraje. Pasar de una vida cómoda a la sencillez y exigencias de un seminario fue el yunque que moldeó su futuro.
Fue ordenado sacerdote a los 33 años en la parroquia Nuestra Señora del Rosario de Antímano, el 16 de julio de 1988, Festividad de Nuestra Señora del Carmen, por el Cardenal José Alí Lebrún Moratinos. Comenzó su vida pastoral en la parroquia Campo Rico de Petare. Se estrenó como párroco llevando una vida consagrada a Dios y con espléndidas demostraciones de amor a sus feligreses. Se le recuerda por su proximidad con la gente humilde, con los taxistas y con la juventud.
Dedicó a la pastoral vocacional del seminario sus primeros años de ministerio, realizando retiros, convivencias, visitas a las parroquias y jornadas de predicación sobre el Buen Pastor trabajando en equipo con la pastoral juvenil y la pastoral catequética de la Arquidiócesis de Caracas. El año 1990, fue nombrado Párroco de la Misión Católica Portuguesa, en Bello Campo, y también se desempeñó como Asesor de Cursillos de Cristiandad en la Arquidiócesis.
Desarrolló a lo largo de su vida sacerdotal, una gran devoción mariana, especialmente organizando la conmemoración en torno a la celebración de las apariciones de la Virgen de Fátima. Estas festividades las impulsó en las parroquias que tenían presencia portuguesa. Trabajó vinculando a todo aquel que tuviese alguna iniciativa por el apostolado Mundial de Fátima, y así desempeñaba con gran éxito toda su labor como Asesor Nacional del Movimiento Sacerdotal Mariano.
Por sus virtudes y cualidades pastorales fue nombrado el año 2005, por el Gobierno Eclesiástico de la Arquidiócesis de Caracas, como Capellán de la Policía Metropolitana, tiempo más tarde, asumiría la capellanía general de la policía. Fue Capellán del Ministerio de Relaciones Exteriores, Justicia y Paz, de la Morgue de Bello Monte, y del Centro Marítimo de Venezuela.
Presidente y Fundador de la Fundación Virgen de Fátima, y miembro de la Junta Directiva de CAVERVI. También figuraba como Miembro del Consejo Consultivo y Fundador de la Casa Hogar Padre Joaquín Ferreira (Ancianato de la Colonia Portuguesa). Director Espiritual de las Damas de la Beneficencia Portuguesa, del Colegio Nuestra Señora de Fátima en San Bernardino. Director de la Academia del Bacalau y la Academia de Espetada en Venezuela.
En el año 2009, fue nombrado Miembro del Consejo Presbiteral y en el 2012, recibió el nombramiento de Canónigo de la Iglesia Catedral de Caracas. El 2013, dos nuevos nombramientos lo encargaron como Director de la Casa Sacerdotal San José y San Isidro y Ecónomo de la Arquidiócesis.
Le fue conferido, el año 2016, el título honorífico de Monseñor por parte del Arzobispado de Caracas. El padre Alexander expreso: “Estoy muy agradecido con Dios y con el señor Cardenal Jorge Urosa por esta distinción. También, agradezco las manifestaciones de alegría que he recibido por parte de la comunidad portuguesa al conocerse la noticia”, expresó.
El año 2018, fue nombrado por el Cardenal Baltazar Porras Cardozo, como Adjunto a la Vicaría Episcopal para el Área Administrativa y de Finanzas de la Arquidiócesis de Caracas. Cargo que desempeñó con modestia, sencillez y responsabilidad. Afrontaba los grandes desafíos con sabiduría y prudencia.
El padre Alexandre Mendonça se mantuvo trabajando, hasta sus últimos días, siempre en beneficio de la comunidad. Era un sacerdote incansable. Buscaba recursos para ayudar a los ancianos, a los enfermos y a la gente pobre de Petare.
Vale resaltar algunos de sus mejores atributos recordados desde tiempos del Seminario. Con su torrente de voz, le fascinaba cantar. Festejar con la comunidad lusitana y degustar los platos de su tierra. Algo que lo caracterizaba eran sus chistes y su participación en las horas de la alegría del Seminario. Sus bromas eran proverbiales.
Gran devoto de la Adoración a la Eucarística, del Santísimo Sacramento y del Sacramento de la Reconciliación. Quienes lo conocían, expresaban que celebrar ese momento del sacramento de la reconciliación con el Padre Alexandre era un momento de gracia y una experiencia única. Impactaban sus reflexiones y sus consejos, convirtiéndose, para sus hermanos sacerdotes, en un papá amoroso. Siempre presto a escucharlos en el sacramento de la reconciliación.
Párroco por más de 30 años de la Misión Católica Portuguesa, de la que recibió reconocimientos y atenciones esmeradas en su última gravedad. El Presidente del Centro Portugués Sergio Nunes, expresó con sentidas palabras lo que significó para ellos el padre Alexandre: “Era nuestro párroco y guía espiritual en la capilla de nuestro Centro Portugués. En los momentos difíciles y en los momentos de felicidad, ahí estaba el padre Alexandre para inculcarnos la fe católica y darnos sus consejos. Se nos ha ido un gran amigo y gran guía espiritual. Estuvo siempre muy ligado a los más necesitados, siempre nos pedía ayuda, porque nos comentaba la situación y él buscaba ese equilibrio entre las personas con poder adquisitivo y los que necesitaban, servía como un conductor de esa ayuda, era esa su mayor virtud, la bondad”.
Que en compañía de sus progenitores y a los pies de la Virgen de Fátima siga intercediendo desde el cielo por su querida Portugal y por su amada Venezuela. Descanse en paz.
18-10-21