¿Cómo afecta la guerra a la fe en Ucrania? Crecen los católicos, pero más los no creyentes
Ningún país europeo vivía algo así desde la caída del nazismo alemán

¿Cómo han afectado 3 años de guerra a la fe y religiosidad de los ucranianos? La guerra a gran escala empezó el 24 de febrero de 2022; en enero de 2025 la ONU calculaba un mínimo de 12.300 víctimas mortales entre civiles en el país, incluyendo 650 niños. Los ucranianos han vivido tres inviernos que recuerdan los de la Segunda Guerra Mundial, bajo bombas, con parientes en las trincheras, corriendo al refugio antiaéreo y con cortes de electricidad.
Ningún país europeo vivía algo así desde la caída del nazismo alemán (en la guerra de Yugoslavia no había ciudades soportando caídas de misiles durante meses y meses, por no decir años).
El 29 de enero de 2025, el Centro Razumkov de estadística, que se financia con apoyo de la Fundación Konrad Adenauer, difundió los resultados de un sondeo con 2.000 entrevistas en persona a adultos de todas las partes del país que no están ocupadas por las tropas rusas. El sondeo se hizo en octubre de 2024 y les preguntó por sus creencias religiosas. Se puede leer el informe completo en inglés en pdf aquí, en Razumkov.org.ua
En ReL hemos querido compararlo con los sondeos de religiosidad del Kyiv International Institute of Sociology (KIIS).
Son varios los hallazgos interesantes:
1) Se confirma, como siempre detectaban las encuestas antes de la guerra, que el Oeste de Ucrania, agrícola, que históricamente perteneció al Imperio Austrohúngaro, es mucho más religioso que el Este, zona minera e industrial que fue repoblada por rusos obreros de ideología comunista y atea. Hoy, los no creyentes y ateos suman un 11,2% en toda Ucrania, pero en el Oeste son apenas un 3,4% de la población, mientras en el Este son un 20%.

Cambios en la religiosidad en Ucrania, de 2020 a 2024
2) Los católicos de rito griego parecen haber crecido ¡un 50 por ciento en dos años! Las estadísticas en 2020 o 2022 localizaban un 8% de grecocatólicos, especialmente concentrados en el Oeste del país. Ahora, el sondeo de Razumkov detecta un 12%. Incluso el líder grecocatólico, el arzobispo Sviateslav Shevchuk, lo comentó recientemente: «“Nuestra Iglesia greco-católica ucraniana está creciendo. Tenemos un número récord de creyentes en nuestro país. Nuestro número ha llegado al 12%».

Sviateslav Shevchuk, arzobispo mayor grecocatólico en Ucrania, el 6 de enero de 2025
Las razones son variadas, pero parece que muchas personas que eran de cultura vagamente cristiana, o agnósticos, al huir de la guerra en el Este y llegar al Oeste, donde hay muchos grecocatólicos (hasta un 40% de la población lo es allí) han descubierto la fe acompañados o acogidos por ellos. También puede haber personas que se han hecho preguntas espirituales a causa de la guerra y hayan recibido ayuda o respuestas en entornos grecocatólicos. También son muchos los soldados que descubren el cristianismo en las trincheras, hablando con capellanes que comparten sus penurias.
Un ejemplo es el de la señora Larisa, desplazada por la guerra: aunque vagamente creyente, ¡no sabía que existían los grecocatólicos! Otro es el de la parroquia de San Vladimir en Jersón, donde se bautizan, confiesan y comulgan muchos adultos que antes no pensaban en Dios.
3) El número de ateos o no creyentes parece haberse doblado con la guerra, pasando del 8 o 8% a un 18%.
Esto se puede atribuir a las tribulaciones propias de la guerra (perder seres queridos, ver horrores, etc…) y también a la situación de las iglesias ortodoxas, al estar enfrentadas las que mantienen la obediencia a Moscú con las que son fieles a la nueva iglesia autocéfala de Kiev reconocida por Constantinopla. Muchos pueden pensar que la Ortodoxia no tiene respuestas claras sobre la guerra o sobre la unidad cristiana.

Religión de los ucranianos, según regiones, en 2024
4) Los ortodoxos fieles a Moscú se dividieron por 3; los fieles a Kiev, estables
En 2020, antes de la guerra, un 15% de ucranianos se consideraban miembros del Patriarcado de Moscú, un 34% de la nueva Iglesia Ortodoxa de Ucrania y un 22% se declaraban ortodoxos sin tener muy claro de qué obediencia. En una primera fase de la guerra en 2022, Moscú perdió dos tercios de sus fieles en Ucrania, que pasaron a la otra iglesia ortodoxa, o, como vemos ahora, pasan a declararse «simplemente cristianos». En julio de 2022 la Iglesia Ortodoxa de Ucrania, independiente y rival de Moscú, llegó a representar a la mitad de los ucranianos, mientras que el nuevo sondeo de 2024 detecta que se identifica con ella un tercio de la población. Parece que el choque entre ambas iglesias ha llevado al crecimiento de los que dicen «simplemente soy cristiano». Los que dicen ser «ortodoxo sin especificar» son casi un 14%, algo más que en 2021.

Una joven en Kiev, en el encuentro online con el Papa de 2025UGCC
5) Casi 2 de cada 3 ucranianos confían en las iglesias
Pasados tres años de guerra y probada la población por muchas penalidades, un 62% de ucranianos dice que confía en «la Iglesia» (en general, la que conoce) y sólo un 27% dice que no confía. De nuevo, en el Oeste la gente es muy religiosa y un 78% confía en la Iglesia y sólo desconfía un 15%. En el Este, la zona más golpeada por la guerra, pero que desde hace un siglo era poco religiosa, un 47% confía en la Iglesia mientras que un 38% desconfía.

Confianza de los ucranianos en la Iglesia, Razumkov Centre 2025
Sviatoslav Shevchuk constata que hay dos campos que pueden ser un espacio misionero: por un lado ese casi 10% de ucranianos que se declaran «simplemente cristianos«, que quizá nunca han conocido al catolicismo (en la mitad oriental del país había pocos católicos). Por otro lado, hay un 13% de personas que dicen que dudan entre creer o no creer, otro 7% se declaran no creyentes, un 5% dice que el tema no les interesa, un 3% no sabe qué decir y sólo un 4% se declara ateo convencido.
En este contexto, el esfuerzo caritativo y humanitario de las comunidades católicas, sostenido en el tiempo y tenaz, puede ser un testimonio para muchas personas que buscan verdad y significado en tiempos de guerra y pérdida.
Desde España es posible ayudar a las víctimas y desplazados a través de Cáritas Española, que colabora con las dos Cáritas ucranianas (la latina y la grecocatólica). La cuenta es: Caixabank ES31 2100 5731 7502 0026 6218. Hay una web para donativos AQUÍ.