Ex-esposa de un líder del grupo terrorista islámico Hamas se convierte al cristianismo tras ver a Jesús en un sueño

Juman Al Qawasmi, hija de uno de los fundadores del grupo terrorista Hamas y exesposa de uno de los líderes del grupo islámico Hamas, creció inmersa en una cultura política y religiosa marcada por el conflicto, el odio hacia los judíos y los cristianos, e incluso hacia grupos islámicos diversos al suyo.

Durante su adolescencia y juventud, Juman asistió a un programa educativo donde se les enseñaba que su lealtad debía estar con la causa de Hamás. Según ella, se le enseñó a ver a los judíos y cristianos como enemigos y como una amenaza religiosa.

El punto de inflexión en su visión del mundo comenzó después de 2007, cuando Hamás tomó el control de Gaza. En su testimonio, describe que hasta entonces los judíos y los palestinos vivían en paz, pero en esas fechas presenció actos de violencia incluso contra palestinos, mientras el grupo consolidaba su poder.

Estas experiencias alimentaron una inquietud profunda. Juman empezó a cuestionar no solo la doctrina, sino también la forma en que su familia y su movimiento político ejercían la autoridad. “No estaba permitido hacer preguntas en el islam”, afirmó. Entre 2012 y 2014, vivió momentos de miedo intenso. En particular, relata que la Fuerza de Defensa israelí advirtió de un bombardeo inminente en su vecindario; esa noche, mientras su familia escapaba, ella oró de forma muy personal: “Dios, si existes, quiero conocerte, quiero que me salves”.

Tras esa súplica, Juman cuenta que tuvo una experiencia que le cambió el rumo de su vida: en un sueño vio a su madre que había muerto un tiempo atrás y estaban sentadas en un balcón mientras veían la luna, esta se fue haciendo grande y vio el rostro de Jesús en la luna, que le habló en árabe: “Soy Dios, Jesús. Tú eres mi hija; no tengas miedo”.

Nunca había escuchado el nombre “Jesús” ya que en su contexto musulmán lo conocen como “Isa”, uno de los profetas en el Corán, ni había tenido contacto con cristianos. Pero aquella visión le despertó una paz interior desconocida. Motivada por esa experiencia, buscó más información. Encontró un sitio web cristiano en árabe, donde se leía un mensaje que le llamó la atención: “Ama a tus enemigos”.

Esa enseñanza le resultó completamente opuesta a lo que le habían inculcado desde pequeña, había que matar a los enemigos, no amarlos y eso fue lo que le hizo darse cuenta de que estaba ante un Dios diferente al que le habían enseñado en el islam. A través de esa página contactó con otros creyentes, comenzó a leer la Biblia y se adentró en la nueva fe hasta que, finalmente, decidió convertirse al cristianismo.

Además de su conversión espiritual, Juman ha realizado críticas explícitas hacia Hamás. Afirma que el grupo no solo predicaba la lucha contra Israel, sino que también gobernaba mediante el miedo y la opresión de los propios palestinos. La joven también explica cómo Hamás utilizó fondos enviados a Gaza para construir túneles que sustituyeron los refugios para civiles y niños utilizados como escudos humanos. “Hamás no defiende Gaza; Hamás es el enemigo de Gaza”, recalca la entrevistada. “Enseña a los niños a odiar, a luchar, les llena la cabeza de violencia.

Pero la verdad no nace del odio”. Y concluye: “Jesús ama a los musulmanes, los ama profundamente y quiere liberarlos”.

Hoy, Juman afirma que su identidad ya no está definida por su linaje familiar ni por su pasado en Hamás, sino por su nueva relación con Dios: se describe a sí misma como “hija del Dios viviente”.-

(ZENIT Noticias / Roma, 22.11.2025)