Francisco renueva con profesionales de prestigio internacional a sus asesores.
La selectísima Academia de las Ciencias y la alta finanza del Vaticano tienen cada vez más rostro de mujer gracias a la prioridad que el Papa Francisco está dando a corregir el desproporcionado peso de clérigos, y de hombres en general, en la dirección de la Iglesia católica. Es un giro histórico, al cabo de dos mil años, en la institución más longeva del mundo. Tan solo en las últimas dos semanas, Francisco ha incorporado a la Pontificia Academia de las Ciencias cinco mujeres de gran valía científica, incluidas nada menos que tres premios Nobel.
Se trata de la astrofísica canadiense Donna Theo Strickland, Nobel de Física en 2018, y de dos bioquímicas galardonadas con el Nobel de Química en 2020 por sus aportaciones al edición genética: la francesa Emmanuelle Marie Charpentier, profesora en Berlín, y la norteamericana Jennifer Anne Doudna, profesora en la Universidad de Berkeley.
Con ellas suben a siete los premios Nobel incorporados por Francisco al «think tank» científico del Vaticano: un total de cinco mujeres – incluyendo a la norteamericana Frances Hamilton Arnold y la israelí Ada Yonath– y dos hombres: el también norteamericano Robert Eric Betzig y el alemán Reinhard Genzel.
El mismo nivel de excelencia mundial y de primacía femenina marcó el Papa al nombrar, hace un año, el nuevo Consejo de Economía del Vaticano, compuesto por seis clérigos cardenales y arzobispos- y siete laicos entre los cuales figura solo un hombre.
Presencia de españolas
Las seis mujeres en el organismo supervisor de todas las actividades económicas del Vaticano son managers del máximo nivel internacional, incluidas dos españolas: Eva Castillo, cuyo historial incluye altos cargos en Merrill Lynch, Visa, Telefónica o Bankia; y María Concepción Osácar Garaicoechea, con altas responsabilidades en el Santander, Banif, el ICO y el grupo Azora.
A su vez, los Museos Vaticanos, uno de los espacios más fascinantes del mundo, tienen como directora desde 2016 a Barbara Jatta, encargada de custodiar y mostrar uno de los patrimonios artísticos más exquisitos de la historia de la humanidad, desde las primeras civilizaciones mesopotámicas hasta obras maestras del siglo XX.
En 2015, Francisco puso al frente del gigantesco Hospital Pediátrico Bambino Gesù, uno de los centros de referencia en Europa, a la incansable Mariella Enoc. La manager piamontesa ha extendido la actividad del ‘hospital del Papa’ a países muy pobres de África y zonas de guerra en Oriente Medio, al tiempo que impulsa la investigación a cargo de 700 científicos, muchos de ellos especialistas en enfermedades raras, que la industria tiende a ignorar por su escasa rentabilidad.
A sus 77 años, Mariella Enoc despliega tal energía que muchos la siguen llamando ‘la leona del Bambino Gesù’. Según la presidenta, «el modo en que dirijo el hospital manifiesta lo que soy: una mujer. Los hombres y las mujeres son distintos en el modo de tomar decisiones. Aunque lo importante es ser uno mismo, las mujeres somos más rápidas en tomar decisiones».
Rompiendo un tabú histórico, Francisco trajo a la Secretaría de Estado -el corazón de toda la maquinaria vaticana- la primera mujer que da instrucciones a los nuncios. Se trata de la jurista italiana Francesca Di Giovanni, responsable de diplomacia multilateral y organismos internacionales, en los que la actividad del Vaticano es continua e intensa.
Otro paso importante ha sido el nombramiento de la antigua manager y patrona de veleros de regatas, Nathalie Becquart, de 52 años, como subsecretaria del Sínodo de Obispos. La especialista en marketing descubrió una llamada como misionera javeriana, y pasó a estudiar sociología y teología. Es la primera mujer que, por su cargo, tendrá voto en el Sínodo de Obispos, con el mismo valor que el más veterano cardenal.
Laicas y madres
En la Santa Sede -los organismos que ayudan al Papa en su tarea estrictamente religiosa- hay ya cinco subsecretarias, incluida la religiosa española Carmen Ros Nortes en el departamento de Vida Consagrada. Pero la mayoría son laicas y madres de familia, como las italianas Gabriella Gambino y Linda Ghisoni en el departamento de Laicos, Familia y Vida.
Francisco ha sido también el primer Papa que ha tenido como viceportavoz a una mujer: la periodista española Paloma García Ovejero, gran modernizadora de la Oficina de Prensa del Vaticano.-
Juan Vicente Boo/CORRESPONSAL EN EL VATICANO ABC de España
