Venezolanos sin cédula: los problemas de la ausencia del consulado en Nueva York
Los trámites de inmigración, los permisos de trabajo y los servicios sociales suelen requerir pasaportes y documentos nacionales de identidad. Con la Patrulla Fronteriza confiscando documentos en masa en la frontera y los consulados de Venezuela en los Estados Unidos cerrados desde 2019, es posible que los miles de migrantes pronto se encuentren en la desesperada necesidad de conseguir documentos, pero sin forma de obtenerlos.
Para Darnell Gil el pasaporte no es su principal preocupación. «Estoy tratando de trabajar lo más posible para enviar dinero a mi esposo que está varado en Panamá, viviendo en las calles», dice entre lágrimas.
Gil, de 33 años, llegó a Nueva York el 16 de septiembre en un autobús que venía de Texas. Huyó de Venezuela debido a la crisis económica allí y la homofobia que enfrentaba en la vida cotidiana. Le tomó más de un mes caminar por el Tapón del Darién y varios países de Centroamérica y México, donde vio cadáveres y tuvo que enfrentar el hambre durante días.
Los trámites de inmigración, los permisos de trabajo y los servicios sociales suelen requerir pasaportes y documentos nacionales de identidad. Con la Patrulla Fronteriza confiscando documentos en masa en la frontera y los consulados de Venezuela en los Estados Unidos, cerrados desde 2019, es posible que los miles de migrantes pronto se encuentren en la desesperada necesidad de conseguir documentos, pero sin forma de obtenerlos.
«Cuando se dan cuenta de que necesitan documentos de identificación nos preguntan: ¿Qué hago? Y luego nos quedamos en un círculo vicioso porque no sabemos a dónde decirles que vayan. No hay adónde ir».
En mayo, los estados de Texas y Florida comenzaron a transportar inmigrantes en buses a ciudades demócratas de todo el país. Más de 20.000 solicitantes de asilo han sido procesados en el sistema de albergues de la ciudad de Nueva York en los últimos seis meses.
Las embajadas de Venezuela en Washington D.C. y todos los consulados en Miami, Chicago, Houston y Nueva York están cerrados al público. Tampoco funciona en Puerto Rico. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, cerró las embajadas en EEUU, luego de que el expresidente Donald Trump reconociera el gobierno interino del líder opositor Juan Guaidó.
«Desde 2019 no hay consulados y no se ha resuelto nada», explica Guillermo Nivos, abogado de inmigración venezolano en Nueva York. «Nos encontramos presos aquí sin saber qué hacer».
Un problema de futuro para los nuevos inmigrantes
Inmigrantes y activistas indican que hay oficiales de Aduanas y Protección Fronteriza de EEUU confiscando pasaportes y tarjetas de identificación nacional después de que los solicitantes de asilo cruzan la frontera. Luego, muchos migrantes luchan por recuperarlos y pasan años viviendo con miedo y ansiedad, sin tener identificación.
Según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP), estos documentos de identificación «deben ser devueltos al detenido en el momento de la liberación, remoción o repatriación o mantenerse en la propiedad personal de los detenidos», explicó un portavoz a Documented. Sin embargo, en la práctica, los migrantes dicen que a menudo nunca vuelven a ver sus documentos.
Organizados por su cuenta
Con un Estado ausente, los venezolanos se organizan en redes sociales para compartir información.
En Nueva York, se necesita un pasaporte válido para solicitar un número ITIN para pagar impuestos, una cuenta bancaria y muchos otros servicios vitales, explicó Anthony Sosa, administrador de una cuenta de Instagram llamada Comunidad Venezolana/Nueva York, con 19.000 seguidores. Es uno de varios neoyorquinos venezolanos que organizan a la comunidad en las redes sociales para ayudar a responder preguntas sobre la renovación de documentos en ausencia de un consulado en funcionamiento.
Los consulados más cercanos están en Ottawa (Canadá) o Ciudad de México. Pero esta opción solo es posible para personas que tengan otra ciudadanía además de la venezolana.
Pero el caso de González es algo único en el sentido de que puede irse y regresar a los Estados Unidos de manera segura. Meléndez dice que este no es el caso de muchos venezolanos que viven en el país.
«Podemos decir, sin dudarlo, que los venezolanos no tenemos forma de obtener una identificación porque unos pocos no nos representan a todos».
Fuente: Documentedny / Tal Cual Digital