El Ahora Desnudo: Reflexiones sobre Richard Rohr
Ver con ojos nuevos lo que siempre estuvo aquí

Ricardo Márquez/SusurrosdelAlma:
Hay verdades que no se entienden.
Se reconocen.
No porque sean nuevas,
sino porque, por fin, estamos listos para verlas.
El ahora como altar
Richard Rohr nos recuerda que la contemplación no es evasión.
Es rendirse a la realidad tal como es,
sin adornos, sin juicios, sin máscaras.
Estar aquí—no en el ayer que duele,
ni en el mañana que asusta.
Aquí, donde Dios ya habita.
El ahora desnudo es exigente,
porque nos quita las historias que inventamos para no sentir.
Pero también es compasivo,
porque nos devuelve al instante donde todo puede comenzar de nuevo.
Ver de nuevo
Rohr llama a esto el segundo mirar:
una mirada que no clasifica ni compara,
sino que acoge.
Ver como si fuera la primera vez.
Ver con el corazón más que con la mente.
Ver la presencia divina en lo pequeño,
lo roto, lo cotidiano.
Y entonces entendemos:
no es que Dios haya estado ausente,
es que no habíamos afinado la vista.
Una oración para despertar la mirada
Señor del instante presente,
quítame la prisa que me aleja de Ti.
Desarma mis prejuicios,
y ábreme los ojos del alma.
Que pueda ver Tu rostro
en el pan, en el niño, en el silencio.
Que el ahora no me asuste,
sino que me revele el milagro de estar vivo.
Amén.
Gracias por mirar más allá de las apariencias.
Gracias por detenerte en lo simple.
Gracias por mostrar que el ahora, desnudo y todo,
sigue siendo sagrado.-




