Encuesta IESA: 93% de las empresas venezolanas está tratando de mejorar servicios y bienes a través de la innovación
Actualmente ha habido algunas iniciativas tímidas de fondos de venezolanos en el exterior que ha participado en sectores como el farmacéutico, alimentos e inmobiliario, que aunque es una buena señal aún resulta insuficiente. Pietri enfatizó que el reto hoy es lograr captar recursos de manera directa, o a través de organismos multilaterales, que permitan que la economía se reactive.
Tecnología e inteligencia de mercado
El panel que cerró el debate sobre la ruta a la competitividad de las empresas venezolanas, moderado por Nunzia Auletta, directora de Desarrollo del IESA, y conformado por líderes y expertos en diferentes áreas de la economía, como industria, comercio, banca, tecnología y servicios, coincidió en que en paralelo a la necesidad de acceso al financiamiento, la armonización tributaria y reglas para la competencia, es indispensable trabajar en la búsqueda de mecanismos que permitan –no solo sobrevivir-sino también superar las expectativas.
En ese sentido, Mariadela Larrazábal, CEO de Daycohost, indicó que, así como las empresas están tratando de identificar rutas de crecimiento para seguir adelante y cómo generar valor, la tecnología también se ha reinventado y se convirtió en servicio, pasando a ser un elemento muy importante en el desarrollo de ese valor para la organización.
Apuntó que “la diferenciación de mi organización para un usuario que demanda cosas distintas está en el desarrollo de la inteligencia de negocios. Haciendo data y analítica nos podemos acercar a la toma de decisiones más efectivas”.
Por su parte, José María Nogueroles, presidente de la Asociación Bancaria Nacional, recordó que en 1992 el sector financiero contaba con 175 instituciones financieras, de las cuales ahora solo quedan 26 entre públicas y privadas, que es insignificante pero suficiente para una economía que se redujo en 80%. Aseguró que “si generamos confianza e innovamos, el mercado nacional debería desarrollarse”.
Luigi Pisella, presidente de la Confederación Venezolana de Industriales, Conindustria, si bien reconoció que en el primer trimestre de 2023 las cifras del sector han bajado, cree que para el segundo lapso debe haber un crecimiento de entre 5% y 7% como consecuencia de las ventas petroleras al exterior y otros recursos. A su juicio, el reto es “hacernos competitivos ante la apertura con Colombia y luego con Brasil. Pero esto no podemos hacerlo solos”.
En el caso del sector alimentos, el presidente ejecutivo de Cavidea, Juvenal Arveláez, ratificó que el crecimiento del sector en volumen se ha producido gracias al sector privado. Apuntó que el consumo ha cambiado en beneficio del arroz; han surgido 106 marcas de harina de maíz precocida, hay inversión en camarones (más de 20 mil hectáreas); exportaciones de cangrejo azul, de confitería y de harina precocida. “Tenemos que seguir trascendiendo la frontera. En Cavidea iniciamos en 2016 un programa de desarrollo de proveedores nacionales y en noviembre de este año presentaremos 105 nuevos proveedores que han desarrollado capacidades y herramientas”.
Asimismo, Francisco Sanánez, CEO del grupo El Palmar, afirmó que a partir de 2020 se produjo una recuperación gradual del sector azucarero, como consecuencia del cese de expropiaciones de tierras y plantas productivas, la flexibilización de precios y de la política cambiaria. En los últimos tres años se triplicó la producción de azúcar y para que ello se consolide considera indispensable que se mantenga el pragmatismo en las políticas públicas, que no se abra la frontera de manera desordenada y se logre la armonización fiscal.
En el caso del sector comercio, Ernesto Blohm, Presidente del Grupo Beco-Blohm, advirtió que en estos momentos el manejo de inventario y el desarrollo del talento son un reto. “Tenemos que hacer un esfuerzo para recuperar proveedores, tratar de tener mayor inteligencia de mercado, tener el producto que es y al precio que es”.
Cerró el ciclo de intervenciones Andrés Simón González-Silén, Chairman de Venemergencia-Asistensi, quien expresó su preocupación por la situación del sector salud en el país. Señaló que la penetración de pólizas de seguro debería ser de 8% y está en apenas 1% y que más de 65% de la población debe pagar por los servicios de salud. En ese sentido, planteó dos propuestas: aprovechar la capacidad instalada de emprendimiento para aplicarla a los problemas sociales (sector salud) y pensar en modelos innovadores.-
Prensa IESA