Opinión

Pan nuestro…

Gloria Cuenca:

De cada día… al rezar y pedir misericordia y perdón al Señor, conectamos con nuestra realidad y sabemos que nos encontramos en una situación caótica, jamás vista antes en el país.  No tenemos más opción sino darnos cuenta de que a nuestra tan amada patria, le cayó una pandemia mucho más fuerte y destructiva que el ya famoso COVID19. La oración, que uso de título sigue, “perdona Señor, nuestras ofensas, así como nosotros perdonamos a quienes nos ofenden”. Una de las tareas más difíciles, esa de perdonar, que debemos enfrentar en estos tiempos. La idea de la justicia, se hace difusa, mientras la venganza, se presenta clara y rotunda. Sin embargo, se trata de rezar el Padre Nuestro y al analizarlo comprender la grandeza de sus palabras, para aplicarlo a diario. Solo así podremos seguir adelante.

     Los días, en nuestro país, se han transformado en una perfecta agonía. Si no fuera por nuestra profunda Fe en Dios y la Virgen, serían más que trágicos. Para quienes conocimos otra Venezuela, la situación es más complicada, por cuanto tenemos que aceptar hechos, sucesos incomprensibles, dañinos y mortificantes, por decir lo menos. No hablemos de los servicios básicos. Todos destrozados y en constante deterioro. Todavía hay algo peor: a diario debemos enfrentar las historias de los malandros, hechos dueños de una parte importante de la ciudad. Bandas que se sienten con todo el derecho de amenazar y dirigir a una buena parte de la población. Mientras los gobernantes, no se atreven ni a chistar. Allí los dejan hacer, como si, en efecto fueran los dueños de Venezuela. ¿Se identifican con ellos? ¿Son su creación? ¿Qué les pasa? Por otra parte, en el Informe de las Naciones Unidas el gobierno, vuelve a ser presentado como torturador, abusador sexual, agresor y arbitrario en el cumplimiento de las leyes y de las recomendaciones, que ya hace un cierto tiempo la alta comisionada de las Naciones Unidas, Dra. Michel Bachelet, les hiciera. Por supuesto el régimen hizo caso omiso y el ente que nos desgobierna solo dijo que la Dra. Bachelet, estaba sesgada en sus informaciones. ¡Que desastre! ¿Creerán que pueden tapar el sol con un dedo? No se dan cuenta de que, como en cuento famoso, no solo el “supuesto rey” está desnudo, sino que toda su “corte” lo acompaña, en las mismas condiciones. Frente a lo que progresiva y constantemente va apareciendo, desde la Corte Penal Internacional, además de la presencia de las Naciones Unidas y la Unión Europea, observamos su situación: a diario resultan más comprometidos y cada día van siendo más acorralados en sus vergüenzas, el incumplimiento de los Derechos Humanos y los Crímenes de lesa Humanidad, que como bien se sabe no prescriben jamás. Pretenden que se les crea, hacen algunos anuncios y dicen que eliminaran a los protectores, de las regiones. (Pero, Bernal, bien gracias) Tímidamente, devuelven la Tarjeta a la MUD (que, como se sabe ya no existe) y hacen dos o tres gestos, (morisquetas, más bien) para que los amigos demócratas e internacionales, les crean. ¿Y así piensan que les levantarán las sanciones? Lo lamento por ellos. No hay levantamiento de sanciones si no hay elecciones libres, transparentes, democráticas y aceptadas por todas las corrientes de la oposición. Interesante destacar que progresivamente se van quedando solos. Nadie cree en ellos, ni siquiera la gente de su propia ideología; quienes cada día, ven con más temor, cómo las acciones de la gente con la que se sienten afines, resultan incompatibles con las utopías que algún día fueron la ilusión de muchos de ellos. Resultó que, la utopía, como se ha dicho era un círculo cerrado, donde no hubo ninguna esperanza, ni posibilidad de nada positivo. Solo represión, persecución, corrupción, hambre, miseria y cada vez más apartarse de las bondades y virtudes, que debemos poseer los seres humanos en nuestro tránsito vital.

 ¡Ah de esas utopías tengo cada historia! No se le cree nada. No funcionó ninguna. Se les vino abajo la URSS, China se volvió capitalista de estado. Y Cuba, cual pariente pobre, vive de las migajas que sacan de la arruinada Venezuela. ¡Qué panorama tan desolador! ¡Dios nos ayude!    .-

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Mira también
Cerrar
Botón volver arriba