Opinión

El debate, señal de unidad y esperanza

Egildo Luján:

El 12 de julio del año en curso se celebró el primer encuentro de debate entre los candidatos(as) a las «Elecciones Primarias»  pautadas para el próximo mes de Octubre. Es decir, para el mes cuando los demócratas venezolanos  seleccionarán  a un ganador, es decir, a quien como candidato único de la mayoría ciudadana opositora, competirá contra el candidato del régimen en las próximas elecciones presidenciales, CONSTITUCIONALMENTE pautadas para el próximo 2024.

Con respecto al evento en sí, el país no puede dejar pasar la oportunidad y el hecho  de reconocer los esfuerzos que acometieron  las autoridades de la Universidad Católica Andrés Bello, como  las diferentes  organizaciones estudiantiles y las Universidades a nivel nacional e internacional, además de las Organizaciones Civiles que colaboraron, para hacer posible la realización del evento, cumpliéndose con lo que organizadores y asistentes  calificaron de hecho transparente y detalladamente organizado.

Los 25 mil asistentes  que lo hicieron conectados por red digital durante todo el evento por  el Canal «VPI NOTICIAS» nacional e internacional y los que lo hicimos personalmente a sala llena y presenciamos así  el primer debate entre los  candidatos que se hicieron presentes en el estupendo y bello Auditorio de la UCAB. No sólo quedaron gratamente sorprendidos con el encuentro. Fueron mucho más allá.

Es que, además, convirtieron la formal reunión para, al finalizar, hacer de ella, un motivo para expresarle a los organizadores su grata sorpresa y felicitaciones, tanto por el hecho de celebrar el evento a casa llena, como por  quedar gratamente sorprendidos ante el tipo de encuentro que se desarrolló. Y, desde luego,  apreciar su proyección motivacional para felicitar a los organizadores, y hacerlo de pie, con el respaldo de una ovación de fuertes aplausos.

Poder conocer y apreciar la participación de 8 de los 14 candidatos que accedieron a competir en las próximas elecciones primarias, con miras a seleccionar un único ganador y quien luego tendrá el respaldo de todos los candidatos y sus simpatizantes del gran frente opositor, sin duda alguna, fue impactante. Pero, además, hacerlo  sin permitir que el régimen, con inhabilitaciones o artimañas, sea quien escoja el candidato opositor a competir contra ellos, sin duda alguna, pasó a ser un motivo de aliento y estímulo, como de motivación principista y participativa.

Esos 8 asistentes dispuestos a debatir y a opinar con plena autonomía entre ellos, dieron una muestra de civismo, como de respeto y de madurez política. Y lo hicieron  exponiendo y opinando sobre temas y posibles soluciones para los tantos y graves problemas que agobian al país y a sus ciudadanos, con situación de hambre, miseria, ruina y destrucción.  Adicionalmente, expusieron sus argumentos sobre los hechos adicionales que aquejan a la nación venezolana, y, desde luego, no dejó de hacerse presente el justificado lamento por la inasistencia de los restantes 6 de los 14 candidatos inscritos, algunos porque no pudieron asistir, y de otros por no querer asistir al evento.

Este evento Cívico-Democrático promovido por la  honorable Comisión Electoral de Primarias, además de haber sembrado el concepto y la esperanza de lograr una sólida unión entre TODA la oposición, hizo sentir que  más del 90% de la población se proyecta hoy  como la única posibilidad de lograr un triunfo en pro del rescate y REFUNDACION del país. Pero hay que trabajar. De hecho, obliga a hacerle un llamado a toda la población ciudadana, con miras a trabajar en atención a la unidad, y también a  razonar, como a entender y aceptar que «los venezolanos llevamos 24 años cometiendo errores» y, con ello,  soportando y, en muchos casos, colaborando -con intención o sin ella- en la destrucción del país.

A los venezolanos, sin duda alguna, les llegó el momento de demostrar cuál es su amor por la Patria, la familia y el futuro porvenir. Pero, además, aceptar humildemente si se está dispuesto y decididos a admitir  en que los hechos y la realidad «nos obliga a pensar y razonar en que podemos estar sobre el inminente peligro de perderlo todo».

No es momento de fomentar ni de permitir caer en divisiones, bandos, ricos o pobres, rencores o rivalidades, vivezas o intereses mezquinos. El que tenga problemas con la justicia, culpable o no, valiéndose de su derecho constitucional, que los enfrente y defienda, cuando los venezolanos logren tener SEGURIDAD, IMPARCIALIDAD E INDEPENDENCIA JURÍDICA.

En este momento, TODOS JUNTOS, es decir, los miembros de las FUERZAS ARMADAS, chavistas-maduristas, opositores de todas las pintas partidistas  y condiciones, están llamados a pensar en su Patria. VENEZUELA se está destruyendo en un voraz incendio. No es momento de pensar en quién lo inició. Es el momento de salvar la casa; esa gran casa que se llama VENEZUELA.-

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