¿Cuántos exorcistas hay en la Iglesia Católica y en cuáles países trabajan?
La Asociación Internacional de Exorcistas cuenta actualmente con 905 miembros. Es la única asociación de exorcistas reconocida oficialmente por la Santa Sede. El número de sacerdotes aprobados por los obispos como exorcistas crece en todo el mundo. También aumentan los asociados a la AIE, que se ha cuadruplicado en 10 años
El padre Francesco Bamonte, presidente de la Asociación Internacional de Exorcistas (AIE) desde 2012, expuso a la XIV Conferencia Internacional de la AIE que «los exorcistas son los testigos, la voz y los embajadores de Cristo y de la Iglesia ante quienes sufren a causa del maligno, con la tarea y el deber de anunciar a sus hermanos y hermanas afligidos por el demonio con su acción extraordinaria, que son particularmente queridos por el Corazón de Jesús, por su Madre y por toda la Iglesia”. Hoy esta labor se realiza «en 58 países de todo el mundo”.
La AIE surgió por el interés de los padres Gabriele Amorth, Jeremy Davies y René Chenesseau. Se fundó en 1993 con la esperanza de aumentar el número de exorcistas oficiales en todo el mundo y para alertar a los obispos sobre el problema actual, que consideraban ignorado o suprimido por algunos jerarcas en las diócesis.
Mons. Karel Orlita, recién elegido nuevo presidente de la AIE, explicó a la agencia SIR la esencia del trabajo de los exorcistas: «No somos magos católicos, ayudamos a la gente en el camino de la fe».
La AIE cuenta actualmente con 905 miembros. Es la única asociación de exorcistas reconocida oficialmente por la Santa Sede. El número de sacerdotes aprobados por los obispos como exorcistas crece en todo el mundo. También aumentan los asociados a la AIE, que se ha cuadruplicado en 10 años.
Europa es el continente más representado en la Asociación con 70% de sus miembros. Italia tiene 483 miembros, Estados Unidos tiene 62 y México 48. Hay pocos de América del Sur, donde destaca Brasil con 46. De Asia participan el 6%: 3 de China y 2 de Taiwán. De África forman parte solo 13 miembros. La Asociación promueve proyectos de formación, como la creación de un curso básico sobre el ministerio del exorcismo que se imparte en Italia, España, Hungría, Ucrania, Corea del Sur, Tailandia, Brasil, México, Argentina.
La AIE ha elegido como presidente a Mons. Karel Orlita, exorcista, canonista y teólogo de la República Checa, miembro del Instituto Secular de los Siervos del Sufrimiento. Nació en un pequeño pueblo de la República Checa. Insiste en que “el compromiso en la formación de los sacerdotes es decisivo: no pocos obispos, más deseosos que nunca de poder contar con uno o varios exorcistas comprometidos en la pastoral de la liberación de la acción extraordinaria del maligno, se quejan de que no tienen sacerdotes en su clero que sean aptos para llevar a cabo el ministerio de exorcista. No basta, dicen, tener una buena preparación teológica y ser un buen sacerdote para ser exorcista: se necesita algo más”.
Mons. Karel Orlita nació en una familia cristiana durante los años del régimen comunista. Trabajó como herrero cuando era imposible entrar en el seminario. Fue espiado por la policía secreta por su fe en Cristo. Ahora dirige la AIE con una visión profunda: “Los cristianos eran ciudadanos responsables y buenos trabajadores. Contribuyeron al bienestar de la República Checa y a su estabilidad moral. Pero el comunismo no podía tolerarlo. Nuestros vecinos estaban a sueldo del régimen, espiándonos e informando de todo lo que veían. Pero, sobre todo, inventaban hechos: lo descubrimos cuando, en los años noventa, por fin tuvimos acceso a los archivos. Durante ese tiempo, sentí el llamado del Señor. Mientras que los funcionarios del partido odiaban a la Iglesia en la República Checa, Dios amaba a los hombres: solo en mi familia surgieron cinco vocaciones a la vida consagrada”.
Sobre las personas que acuden al exorcista, refiere: “Hay mujeres y hombres de fe que sufren una acción que Dios permite, a veces extraordinariamente, por parte del maligno. Pero también hay gente que se dirige a nosotros como si fuéramos los magos buenos, los magos católicos. No tienen una idea clara del exorcista, que es un sacerdote que lleva a cabo el ministerio de Cristo con la licencia del obispo”.-
(ZENIT Noticias / Roma, 23.11.2023)