Los retos de los jesuitas para la próxima década siguen vigentes cinco años después
Espiritualidad, excluidos, ecología y jóvenes
El 19 de febrero de 2019 (hace 5 años) se hacía público el documento de Preferencias Apostólicas de la Compañía de Jesús (2019-2029)
Con vigencia de diez años, el documento intentaba sentar las bases de la acción apostólica conjunta del cuerpo universal de la Compañía de Jesús.
En estos días, con ocasión del quinto aniversario de su publicación, los jesuitas de todo el mundo reflexionan sobre su vigencia y cumplimiento.
El documento de Preferencias apostólicas estará vigente hasta el año 2029
Hace cinco años, en febrero de 2019, Religión Digital publicaba con el título «Espiritualidad, Excluidos, Ecología y Jóvenes, retos de los jesuitas para la próxima década” un artículo sobre las cuatro preferencias apostólicas de los jesuitas del mundo para los próximos diez años (2019-2029) fundamentadas –según el texto oficial- desde un sólido basamento científico incluido en el Apostolado Intelectual.
Decíamos entonces que el Padre General de los jesuitas, Arturo Sosa Abascal, había hecho públicas esa mañana, día 19 de febrero de 2019, una carta personal a todos los jesuitas del mundo sobre las llamadas «Preferencias Apostólicas Universales» de la Compañía de Jesús, que marcarían su rumbo en la próxima década.
Desde el año 2019 hasta aquí, han pasado cosas importantes en la Compañía de Jesús. En mayo del año pasado, la Compañía de Jesús. Tras la Congregación General de los jesuitas tenida en Roma en octubre y noviembre de 2016, en el mes de mayo del año pasado, 2023, tuvo lugar en el Santuario jesuita de Loyola (Guipúzcoa), junto a la casa solariega de San Ignacio, la llamada 71 Congregación de Procuradores.
La Congregación de Procuradores
La Congregación de Procuradores, en la que participaron más de 100 jesuitas de todos los continentes fue un momento clave: la presentación del documento fruto de muchos meses de investigación y recogida de datos, “De Statu Societatis” (sobre la situación de la Compañía) por el P. General, Arturo Sosa. Entre otros temas, el “De Statu Societatis” reflexionó sobre las Preferencias Apostólicas Universales y cómo están configurando nuestra vida y misión.
“La Congregación de Procuradores es una oportunidad única para escuchar al Espíritu”, dijo entonces el padre Arturo Sosa. “Vivimos en un período de enormes cambios y las Preferencias Apostólicas Universales nos han lanzado a una aventura de descubrimiento. Nuestra casa común está amenazada como nunca antes; la pobreza aumenta y la gente se siente cada vez más alienada y marginada; los hombres y mujeres están hambrientos del Espíritu que da vida; los jóvenes anhelan un futuro lleno de esperanza. El encuentro aquí en Loyola será una ocasión para reflexionar sobre cómo va esta aventura y ayudarnos a profundizarla”.
Las preferencias apostólicas
Después de tres años de discernimiento de toda la Compañía después de la Congregación General de 2016, han sido elegidos estos cuatro campos preferentes para trabajar: Espiritualidad, Excluidos, Ecología y Jóvenes dentro del contexto del Apostolado Intelectual, propio de la Compañía.
Las redacciones de las preferencias fueron entregadas al Papa Francisco unos días antes, y este oró por ellas antes de devolvérselas al Padre General como Misión del Santo Padre. Una «Preferencia Apostólica» es una prioridad elegida después de que muchos jesuitas discerniendo en común hayan sentido que el Espíritu Santo mueve a la Compañía a dedicar su atención y recursos hacia ella.
Tras su publicación, el P. General pide a jesuitas y compañeros de misión que se centren en cómo sus ministerios actuales y futuros pueden integrar las preferencias y abordar los problemas del mundo real que contienen. Cada jesuita, cada comunidad, cada provincia y conferencia de provinciales discernirá cómo implementarlas y hacia dónde los lleva el sueño de Dios.
Cuatro áreas vitales
Las 4 preferencias apostólicas, que señalan cuatro áreas vitales en la situación actual del mundo, son:
– Mostar el camino hacia Dios mediante los Ejercicios Espirituales y el Discernimiento: Ayudar a las personas a encontrar a Jesucristo y seguirle.
– Caminar junto a los pobres, los descartados del mundo, los vulnerados en su dignidad en una misión de reconciliación y justicia.
– Acompañar a los jóvenes en la creación de un futuro esperanzador.
– Colaborar en el cuidado de la Casa Común. Trabajar, con profundidad evangélica, para proteger y renovar la Creación de Dios.
Una Compañía de Jesús que deja de ser solo europea
Durante siglos, la Compañía de Jesús, aunque repartida por todo el mundo, tuvo un marcado sesgo europeo. Los padres Generales siempre fueron europeos (o de origen europeo) hasta que ha llegado el venezolano Arturo Sosa.
En la actualidad, solo el 22.8% de los jesuitas están en Europa, mientras que el 33% trabajan en Asia. Esto es un dato muy importante para integrar otras culturas (africanas, americanas, del Pacífico) en la espiritualidad y trabajo apostólico de la Compañía.
El proceso de discernimiento que ha dejado como fruto estas cuatro preferencias apostólicas arrancó en el año 2016. La Congregación General que ese año nombró al P. Arturo Sosa nuevo Prepósito General le invitó a revisar las preferencias apostólicas aprobadas en 2003 por el P. General Peter Hans Kolvenbach (1928-2016).
Las prioridades vigentes desde aquel año han sido China, África, el apostolado intelectual, las casas internacionales en Roma, y los migrantes y refugiados. Estas prioridades han sido sustituidas por las señaladas en el anuncio de hoy.
En febrero de 2019 había 15.536 jesuitas desarrollando su misión en el mundo. Pero el 2022 el número había descendido a 14.422. Este dato es muy preocupante para el futuro de las muchas instituciones y obras de la Compañía desparramadas por todo el mundo. Los intentos de integrar laicos en los proyectos de los jesuitas son muchos, pero se consideran insuficientes. El futuro no se vislumbra halagüeño.
Enviados a colaborar en la reconciliación de todas las cosas en Cristo
Como hemos dicho, en mayo de 2023 tuvo lugar en Loyola la llamada 79 Congregación de Procuradores de la Compañía de Jesús. En ella, entre otras cosas, se aprobó el documento “De Statu Societatis”.
El padre General de la Compañía de Jesús, Arturo Sosa, recogió todos los frutos de la Congregación en un documento que se ha hecho llegar a todos los jesuitas del mundo para su reflexión “orante”: su título: “Enviados a colaborar en la reconciliación de todas las cosas en Cristo». A lo largo de 150 páginas de texto, se aportan elementos de reflexión y análisis de los siete grandes temas de la Congregación de Procuradores.
En este texto firmado y avalado por el padre General de la Compañía de Jesús, padre Arturo Sosa, encontramos muchas cosas. En primer lugar, un testimonio del modo en que el Espíritu Santo actúa en la Compañía de Jesús.
En segundo lugar, una invitación a dejar que ese mismo Espíritu Santo actúe en la vida personal de los jesuitas y en la vida del cuerpo apostólico de la Compañía.
Seis capítulos que tratan los siguientes temas. *Siguiendo a Ignacio, somos enviados al mundo; *somos enviados por la Iglesia para llevar la Buena Nueva a toda la humanidad; *estamos llamados a ser cada vez más compañeros de Jesús humilde y pobre; *nuestra vida, asociada a nuestra misión, está en tensión entre Dios y el mundo; *somos colaboradores en la misión de Cristo, no artífices de nuestros propios proyectos; *buscamos formas de gobierno que favorezcan nuestro servicio, nuestra misión; en definitiva, estamos aquí para “amar y servir”.
Por supuesto, dirán algunos, nada de esto es esencialmente nuevo. Desde la Congregación General 36ª (2016), durante la cual el P. Arturo Sosa fue elegido Prepósito General de la Compañía, las Preferencias Apostólicas Universales han guiado la formación de los jesuitas, los compromisos en el mundo, la pedagogía en las instituciones educativas y mucho más.
La reflexión sobre el estado actual de la Compañía ayudará, en primer lugar, a las comunidades jesuitas a reposicionarse en relación con estas orientaciones. Permitirá a todo el cuerpo apostólico de la Compañía, tanto religiosos/as como laicos/as comprometidos/as, beneficiarse de la dinámica del Año Ignaciano (2021-2022). Dará un nuevo impulso a la oración para apoyar la vida y el testimonio de tantos de nuestros hermanos y hermanas que viven en situaciones difíciles, de pobreza, incluso de persecución.-
| Leandro Sequeiros sj. Presidente de ASINJA (Asociación Interdisciplinar José de Acosta)/RD