Bartolomé: «La ciencia es un regalo de Dios que no tiene precio»
Mensaje de Navidad del Patriarca de Constantinopla
En su mensaje de Navidad, el Patriarca Ecuménico Bartolomé recuerda a los fieles el significado de la encarnación divina y la «deificación del hombre por la gracia» e invita a todos a aceptar con gratitud el don de la ciencia, especialmente en tiempos de pandemia
El Patriarca agradece a Dios el trabajo de los científicos en el desarrollo de vacunas y medicamentos para tratar este virus y anima a todos los fieles a vacunarse y a respetar las medidas de seguridad adoptadas por las autoridades sanitarias
– «La Encarnación divina, junto con la manifestación de la verdad sobre Dios, revela también la verdad y el destino último del hombre, nuestra deificación por la gracia». Así escribe el Patriarca Ecuménico de Constantinopla Bartolomé a los fieles en su mensaje para la Navidad 2021.
«Por tanto -continúa-, quien honra a Dios debe honrar también al hombre, y quien socava al hombre deshonra también a Dios, que ha asumido nuestra naturaleza. En Cristo, cuando hablamos teológicamente de Dios, hablamos al mismo tiempo del hombre».
La vida de la Iglesia, por tanto -explica el Patriarca-, representa, expresa y sirve a este misterio salvífico de la divino-humanidad». «Vive y predica la verdad de la auténtica vida espiritual y la cultura del amor y la solidaridad«. Además, «ofreciendo el testimonio ‘de la esperanza que hay en nosotros’ (1 Pe 3,15), no considera en absoluto la civilización contemporánea como otra Nínive pecadora, invocando como Jonás la ira divina sobre ella y su abolición, sino que la Iglesia lucha por la transformación de la cultura en Cristo».
A la luz de todo esto, en la Iglesia de hoy -subraya- se necesita «imaginación pastoral» y «diálogo» y no «argumentación»; «participación y no abstención, actos concretos y no teoría abstracta, aceptación creativa y no rechazo general». La fidelidad a la tradición de la Iglesia no debe ser un atrapamiento en el pasado -continúa- sino el uso de la experiencia del pasado en el presente de forma creativa.
Mirar al nuevo año guiados por Cristo
Teniendo en cuenta lo que la humanidad ha vivido en el último año, es decir, la situación generada por la propagación de la pandemia del Covid-19, el Patriarca agradece a Dios el trabajo de los científicos en el desarrollo de vacunas y medicamentos para tratar este virus y anima a todos los fieles a vacunarse y a respetar las medidas de seguridad adoptadas por las autoridades sanitarias.
La ciencia -dice-, mientras trabaje al servicio del hombre, es un don inestimable de Dios. Debemos aceptar con gratitud este don y no dejarnos engañar por voces irresponsables de «consejeros espirituales» ignorantes y autoproclamados representantes de Dios y de la fe auténtica, que, sin embargo, se contradicen miserablemente por su falta de amor a sus semejantes, cuyas vidas exponen a graves peligros».
El Patriarca, convencido de que la vida de todos está dirigida «por el Dios de la sabiduría y del amor», invita a mirar al 2022 como un año de salvación, a pesar de los acontecimientos, porque «está guiado por Cristo, que ama a los hombres y cuida de todas las cosas» y que «desea que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad». (1 Tim 2.4).
Deseando, por tanto, «un año nuevo saludable, fecundo en buenas acciones y lleno de dones divinos en favor del Señor», el Patriarca concluyó su mensaje invitando a adorar al niño Jesús nacido en Belén y a rezar «por la convivencia pacífica y armoniosa de todos los que residen en Tierra Santa».-
| Anna Ponce
(Vatican News)/RD