Así fue como San Ireneo ayudó a salvar a la Iglesia Católica del cisma
San Ireneo de Lyon una vez ayudó a salvar a la Iglesia Católica en el siglo II del cisma, y en la actualidad el recientemente declarado “Doctor de la Unidad” es el santo patrono de un grupo de teólogos que trabajan en problemas actuales en el diálogo ortodoxo-católico.
Según el Grupo de Trabajo Conjunto Ortodoxo-Católico de San Ireneo, el nuevo Doctor de la Iglesia entendió que “la diversidad en la práctica no implica desunión en la fe”.
Durante la “Controversia Pascual” en el siglo II, Ireneo desempeñó un papel decisivo en la mediación de la disputa sobre la fecha de la Pascua.
Dos tradiciones principales existían en la Iglesia primitiva en ese momento. En gran parte de Asia Menor, la Pascua se celebraba el 14 de Nisán (la Pascua judía), una celebración conocida como cuartodecimanismo. Pero en Roma y gran parte de Oriente, la fiesta caía en un domingo determinado, una diferencia que también tenía implicaciones para las prácticas de ayuno.
Cuando Ireneo se desempeñaba como sacerdote en Lyon, en la actual Francia, fue enviado a Roma en el año 177 para mediar en esta controversia y encontrar una resolución.
Ireneo escribió: “El desacuerdo en el ayuno solo habla de nuestro acuerdo en la fe”.
El santo “intervino con éxito ante el Papa Víctor I para levantar la excomunión de los cuartodecimanos y así evitar un cisma”, dijo el grupo de trabajo de Ireneo a CNA –agencia en inglés del Grupo ACI– el 23 de enero.
Los 26 teólogos católicos y ortodoxos que componen el Grupo de Trabajo Conjunto Ortodoxo-Católico de San Ireneo discutieron el papel de su santo patrono en la Controversia Pascual durante su reunión más reciente en Roma.
Fue durante esta reunión que el Papa Francisco reveló por primera vez que planeaba nombrar a Ireneo el 37° Doctor de la Iglesia con el título de “Doctor de la Unidad”.
El Papa lo hizo oficial el 21 de enero con un decreto firmado durante la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos.
Tras la promulgación del decreto, el Grupo de Trabajo Conjunto Ortodoxo-Católico de San Ireneo le dijo a CNA por qué el santo era una buena elección para el título de “Doctor de la Unidad”.
“Como nativo de Asia Menor que eventualmente se convirtió en obispo en Occidente, Ireneo en su persona refleja la estrecha interconexión entre Oriente y Occidente en la Iglesia primitiva”, dijo el grupo a CNA.
“Sus escritos abordan temas críticos como la ‘regla de fe’, la sucesión apostólica, el canon de las Escrituras, todos los cuales son elementos clave de la fe compartida por católicos y ortodoxos”, agregó.
El Grupo de Trabajo Conjunto Ortodoxo-Católico de San Ireneo está compuesto por 13 teólogos católicos y 13 teólogos de varias iglesias ortodoxas (Constantinopla, Antioquía, Rusia, Serbia, Rumania, Bulgaria, Grecia, América).
El grupo se ha reunido anualmente desde 2004, alternando entre países de mayoría católica y ortodoxa, incluidos Italia, Rusia, Francia, Rumania, Austria y Grecia.
De acuerdo con el estilo del grupo de trabajo conjunto, sus respuestas a las preguntas de CNA fueron coescritas por un representante católico y ortodoxo del grupo y luego aprobadas por sus dos cosecretarios: Assaad Elias Kattan, presidente de Teología Ortodoxa en la Universidad de Münster, y Johannes Oeldemann, el director católico del Instituto para el Ecumenismo Johann Adam Möhler.
“Ireneo nos ha dejado un magnífico legado teológico escrito de una manera especialmente querida por los ortodoxos, porque integra motivos intelectuales y espirituales, y al mismo tiempo tan querido en Occidente que sus principales escritos se han conservado en latín”, dijo el grupo de trabajo.
Con el nuevo decreto papal, Ireneo se convirtió en el primer santo en ostentar los títulos de mártir y Doctor de la Iglesia.
A raíz del decreto, algunos han planteado la cuestión de si existe una prueba histórica de que Ireneo fue realmente un mártir.
El Grupo de Trabajo Conjunto Ortodoxo-Católico de San Ireneo, sin embargo, explicó por qué sostiene que Ireneo debería tener ambos títulos.
“Aunque es venerado como mártir tanto por católicos como por ortodoxos, hay poca información sobre la forma real de su muerte”, dijo.
“Sin embargo, el martirio no se mide solo por el sufrimiento real, sino también por un amor que expresa ese afán de pasar por lo que Dios permita que suceda. Ireneo, en este sentido, fue al menos un mártir del deseo”.
“Además, en sus influyentes escritos, fue un poderoso testigo (‘mártys’ en griego) de la fe cristiana, ciertamente merecedor del título de mártir y ‘Doctor de la Unidad’”, señaló el grupo.
El Cardenal Kurt Koch, presidente del Consejo Pontificio para la Promoción de la Unidad de los Cristiano, ha acogido con satisfacción el trabajo del Grupo de Trabajo Conjunto Ortodoxo-Católico de San Ireneo durante los últimos 18 años como un apoyo valioso para el diálogo internacional católico-ortodoxo romano.
La próxima reunión del grupo se llevará a cabo en Rumania en octubre de 2022.
“La enseñanza de este santo pastor y maestro es como un puente entre Oriente y Occidente: por eso lo llamamos Doctor de la Unidad, Doctor Unitatis”, dijo el Papa Francisco en su discurso del Ángelus el 23 de enero.
Traducido y adaptado por Diego López Marina. Publicado originalmente en CNA.-