El P. Alberto Reyes, sacerdote de la Arquidiócesis de Camagüey (Cuba), resaltó el reto “heroico” y “vital” de los padres de familia cubanos para educar a sus hijos en la fe e intentar apartarlos del adoctrinamiento ideológico y partidario de la dictadura.
“Educar a un hijo es siempre un reto, pero en este momento de la historia cubana, el reto no solo es heroico, sino que es vital como nunca antes”, sostuvo el presbítero el 15 de febrero, en una columna de opinión.
El P. Reyes cree que, aunque el sistema sociopolítico cubano logre subsistir algunos años más, ya no tiene “nada que ofrecer” y “todas sus estructuras se resquebrajan en un ambiente de supervivencia, de estampida migratoria y de sálvese quien pueda y como pueda”.
Cuba sigue siendo un estado autoritario de partido único y con un régimen que restringe las libertades de expresión, asociación, reunión y otras funciones humanas básicas, desde los primeros años de la revolución cubana de 1959.
Según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos, el número de cubanos que intentan ingresar a ese país, principalmente por la frontera con México, se disparó de 39.000 en 2021 a más de 224.000 en 2022.
En ese contexto de diáspora y familias separadas o rotas, el P. Reyes considera que hay cuatro retos primordiales para que los padres cubanos defiendan a su familia.
1. Reto de la formación intelectual de los hijos
Este reto, indicó el sacerdote, se debe a que en las escuelas del régimen no existen las constancias de asistencia del alumnado, y “por decreto, hay que aprobar a todos, buenos y malos, aplicados e irresponsables”.
En estos colegios “hay muchos maestros improvisados que agotan en minutos lo que tienen que decir, porque una vez dicho ‘lo que manda el programa’, no saben qué más decir y no tienen la pasión de educar, de formar, de sacar lo mejor del alma de sus alumnos”, lamentó.
Muchos de los alumnos y padres optan por la migración, con el fin de que obtengan una educación de calidad.
2. Educación en valores
El P. Reyes explica que se refiere al “respeto, honestidad, amabilidad, servicio, sacrificio”, es decir, los “comportamientos vitales que generan hombres y mujeres de bien y de provecho, pero que es necesario enseñar, tanto con el ejemplo como con la palabra”.
3. El reto de amar a la patria
El sacerdote dijo que en este apartado está “la difícil tarea de separar lo que significa la tierra que los vio nacer de una ideología” y que es todo un reto enseñar a los hijos amar a una patria “de la que todos quieren irse”.
4. Reto de inculcar la fe
Un último reto para los padres cubanos es guiar a sus hijos hacia un encuentro con Dios.
“En primer lugar, porque los padres de hoy pertenecen a generaciones a las cuales se les arrancó la fe y se les hundió en el adoctrinamiento ateo que solo provoca despersonalización y vacío existencial”, explicó el P. Reyes.
Pero no solo eso, pues otra dificultad es que las familias han vivido “sumergidas en la supervivencia y en la lucha cotidiana por lo necesario”, por lo que “no es fácil para ellos llegar a ese momento sereno en el cual miras a tu familia y dices: ‘busquemos a Dios’”, explicó el presbítero.
Resistir a “la dureza de lo adverso”
El P. Reyes cree que, aunque “los vientos recios pueden torcer las plantas jóvenes”, si estas últimas “crecen junto a aquellos que las protegen y las enseñan”, se puede llegar a “sacar lo mejor de la dureza de lo adverso”.
“Entonces los troncos se robustecen, las raíces se profundizan, y las pequeñas plantas se convierten en los mejores árboles, esos que forman, poco a poco, un bosque nuevo capaz de ofrecer a los que habiten bajo su sombra un presente y un futuro”, concluyó.-
Aciprensa
