El rito de la paz en la Misa no es un saludo ni un gesto de simpatía, explica religiosa
La directora de la Cátedra de Teología de la Vida Consagrada de la Universidad Eclesiástica San Dámaso, Hna. Carolina Blázquez Casado, OSA explica que el rito de la paz presente en la Eucaristía “no es un saludo ni un gesto de simpatía”.
Así lo expone en un vídeo publicado por el centro de estudios dependiente de la Archidiócesis de Madrid, que responde a la pregunta sobre el sentido del rito de la paz incluido dentro de la liturgia eucarística.
El gesto de la paz, que se realiza entre el rezo del Padrenuestro y la fracción del pan, “es un paso previo para poder acercarnos a comulgar el Cuerpo de Cristo de una manera digna”, explica la religiosa agustina.
Se realiza recordando las palabras de Jesús recogidas en el Evangelio según San Mateo: “Si cuando vas a presentar tu ofrenda sobre el altar, te acuerdas allí mismo de que tu hermano tiene quejas contra ti, deja allí tu ofrenda ante el altar y vete primero a reconciliarte con tu hermano, y entonces vuelve a presentar tu ofrenda”.
La Hna. Blázquez detalla que “los cristianos, desde el primer momento que empezaron a celebrar la Eucaristía, tenían en la memoria y el corazón estas palabras del Señor. Y por eso el rito de la paz está presente desde muy antiguo en la celebración eucarística”.
Por eso no es un simple gesto filantrópico o educado, sino que expresa “el deseo sincero de reconciliarnos, de superar todas las divisiones entre nosotros, de ser instrumentos de paz, para ser verdaderamente miembros, unos y otros, del único cuerpo de Cristo”.
El vídeo publicado por la Universidad Eclesiástica San Dámaso forma parte de una serie titulada La Eucaristía. Saber más en la que varios docentes de la institución explican diversos aspectos del sacramento.
Abusos en el rito de la paz
En el año 2014, siendo prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos el Cardenal Antonio Cañizares, se publicó una carta sobre El significado ritual del don de la paz en la Misa aprobada y confirmada por el Papa Francisco.
En ella se aborda el problema derivado de algunas “expresiones exageradas” del rito de la paz, que llevó al Papa Benedicto XVI a realizar una consulta a las Conferencias Episcopales sobre la posibilidad de que fuera modificado o eliminado del Misal Romano.
Finalmente, se decidió conservarlo en su lugar, ofreciendo una serie de “disposiciones prácticas para expresar mejor el contenido del signo de la paz y para moderar los excesos, que suscitan confusión en la asamblea litúrgica justo antes de la Comunión”.
En la carta se subraya que “si los fieles no comprenden y no demuestran vivir, en sus gestos rituales, el significado correcto del rito de la paz, se debilita el concepto cristiano de la paz y se ve afectada negativamente su misma fructuosa participación en la Eucaristía”.
Entre las disposiciones, se recuerda que el rito de la paz puede ser omitido “e incluso, debe ser omitido” si las circunstancias así lo aconsejan y se insta a las Conferencias Episcopales “en aquellos lugares en los que se optó por gestos familiares y profanos del saludo” a sustituirlos por “otros gestos más apropiados”.
Así, se detalla como “abusos” la introducción de un canto para la paz, que los fieles se desplacen para realizarlo, que el sacerdote abandone el altar para dar la paz a algunos fieles, o que sea aprovechado el momento para “felicitar o expresar condolencias”.-